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Quedan siete días exactos para que inauguremos oficialmente el verano y eso, aunque queramos evitarlo, nos pone alerta con el fin de querer lucir nuestra mejor versión corporal. Así que, tanto si empezaste hace un tiempo con la famosa 'operación bikini' -aunque nosotras defendemos que esto es algo de debe trabajarse de manera saludable todo el año-, como si te has quedado rezagada, algo que ayuda y mucho a mantener la línea es evitar picar entre horas y comer cuando no se tiene hambre. Porque, aunque está bien darse un capricho de vez en cuando y tomar ese alimento que tanto te apecete, es peligroso caer en el impulso. ¿La mejor forma de evitarlo? Una vez más, la que sigue Isabelle Junot.
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Ya sabes que ella se ha convertido en Binge Eating Coach, es decir, en una entrenadora de alimentación emocional que te ayuda a controlar los atracones y te anima a disfrutar de lo que más te gusta, todos los días, sin sobrepasarte o perder el control. Por eso, la marquesa de Cubas ha querido enumerar cuáles son sus trucos y lo que a ella le ayudó a frenar esos impulsos que te mandan a la nevera de manera innecesaria:
- Practicar identificar cuándo era hambre y cuándo era antojo.
- Si era hambre, me comía algo nutritivo. si era antojo, cuestionaba cuándo fue la ultima vez que comí, cuánto comí y qué comí. - me nutria y me permitía disfrutar de mi antojo si seguía ahí.
- O me permitía disfrutar de un 'tentempié' si lo consideraba adecuado (si acababa de comer por ejm).
- O Practicaba el guardarme ese dulce para después de comer, en vez de comerlo de inmediato. (A estar quieta y aceptar las emociones que surgían y transformé el 'ansia' por comer algo por ilusión y anticipación.)
- Y finalmente, estar preparada, y tener cosas dulces en casa hechas en casa con ingredientes de mejor calidad. (banana bread, muffins, snikers por ejemplo).
- Pero sobre todo, no me castigaba si no conseguia esperarme a despues de comer/cenar o si no comía la opcion mas sana.
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Eso sí, como Isabelle Junot anima siempre a tener una relación sana con la comida y a enfrentarse a ella de manera consciente, también ha querido dejar claro que "los antojos son humanos. No hay que temerlos, pero es cierto que pueden empezar a controlarte si no aprendes a gestionarlos. Una cosa es sentir hambre físico y otra es tener ganas de algo. Cuando sientes hambre, está bien comer, incluso cuando no estás hambrienta y te apetece una cosa, tampoco es 'malo' no tienes porqué castigarte o machacarte mentalmente".
Unos consejos muy útiles que nos van a servir muy bien para mantener la línea de cara al verano sin agobiarnos y sin sentir ansiedad. Porque tal y como termina diciendo ella, "se hace lo que se puede, es la intención lo que cuenta".
