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Alice Campello está disfrutando de unos días de ensueño en las islas Maldivas. La influencer y empresaria italiana está compartiendo con sus fans algunas imágenes espectaculares para mostrar el paraíso en el que se encuentra y, además, presumir de tipazo con diferentes bikinis y bañadores. "El lugar más increíble que he visto", ha escrito en uno de sus posts. La mujer del futbolista Álvaro Morata ha causado sensación con estas fotos pero hay un detalle en el que no hemos podido evitar fijarnos y es que parece que el sol le ha terminado jugando una mala pasada.
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Protege tu piel del sol
En esta imagen puede verse el 'quemazo' de Alice tras un día de playa, con la piel con algunas zonas bastante enrojecidas. "Lo primero que veo es que no son quemaduras regulares", nos cuenta Sonia Ferreiro, cosmetóloga y biotecnóloga en Byoode. "Esto es un claro signo de que el protector solar no se ha aplicado de manera uniforme por todo el cuerpo. Para evitar que esto pase, mi recomendación es asegurar que lo utilizamos de manera uniforme e, incluso, aplicar dos capas para evitar el margen de error", explica.
Por su parte, Estefanía Nieto, directora técnica de Medik8, cree que: "Este tipo de quemaduras a veces aparecen cuando aplicamos el SPF y nos metemos luego al agua y, al salir, no lo reaplicamos. El agua del mar o de la piscina puede retirar el protector en ciertas zonas y, si al salir estamos sobre expuestos, se pueden crear esas aguas con rojeces". Coincide con ella Raquel González, cosmetóloga y directora técnica de Perricone MD: "Es importantísimo ser conscientes de que el protector solar debemos reaplicarlo con asiduidad". La experta recomienda que, para evitar este tipo de quemaduras, lo que debemos hacer es volvernos a aplicar protector solar pasadas dos horas si no nos hemos metido al agua y, si lo hemos hecho, reaplicar cuando nos hayamos bañado y nos hayamos secado.
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Los consejos del experto
Aplicar el protector en rostro y cuerpo antes de la exposición solar es primordial, tal y como recuerdan los profesionales de ROC. "Una cantidad reducida de producto reduce significativamente el nivel de protección, además, no solo debemos aplicarlo antes sino con frecuencia durante la exposición solar, especialmente después de sudar, nadar o secarse con una toalla, ya que esto retira el producto".
"Siempre recomendamos evitar el sol del mediodía, ya que es el más potente y dañino, así que es mejor resguardarnos en la sombra. Tampoco es bueno permanecer demasiado tiempo al sol, ya que aunque usemos protector solar puede quemarnos", nos confiesan. Además apuntan que: "Tras la exposición solar es importante aplicar productos regeneradores con ingredientes clave como el aloe vera, y usar after sun en rostro, cuerpo y escote no solo para proteger la piel sino para que, después de las vacaciones, tengamos un bronceado más duradero".
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¡Cuidado!
Sobre este tema hemos hablado con María Pérez de Villaamil, directora de CentroMem. "Cuando la piel ha sufrido quemaduras por exceso de sol u otros tratamientos, es crucial brindarle cuidados especiales para promover su recuperación y prevenir complicaciones a largo plazo. En primer lugar, aplicar compresas frías o toallas empapadas en agua fría sobre la piel afectada durante 15-20 minutos para reducir la inflamación y aliviar el dolor. A partir de ahí, lo esencial para las quemaduras solares es la hidratación para reponer la humedad perdida. Utilizar cremas o lociones extrahidratantes que contengan ingredientes como aloe vera, caléndula o vitamina E para calmar la piel y restaurar su barrera protectora".
"Lo que hay que evitar es el uso de hielo directamente sobre la piel, ya que puede empeorar el daño y también los productos irritantes durante el período de recuperación. Los productos que puedan irritar aún más la piel son los perfumes, productos con alcohol o exfoliantes. Habría que optar por productos suaves y sin fragancia diseñados específicamente para pieles sensibles", concluye.
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Cuidado con el bronceado
"Las quemaduras solares no dejan de ser lesiones en la piel, causadas por la exposición excesiva a los rayos ultravioleta (UV) del sol, que producen enrojecimiento, dolor, inflamación, ampollas e incluso descamación", apunta la doctora Carmen Martín, especialista en medicina estética. "La hidratación es fundamental para calmar la piel y prevenir la descamación, por ello, también hay que beber agua a menudo".
Por último, la doctora Silvia Cornacchione, cofundadora de Nonna Cosmetics. "Como experta en cuidado de la piel y bienestar, mis consejos para protegernos del sol y evitar quemaduras cutáneas son: ser conscientes de la importancia del uso de protector solar adecuado (factor 50 o más alto dependiendo el destino y la actividad, considerando opciones resistentes al agua y sudor), evitar la exposición directa al sol durante las horas más intensas (de 10:00 - 16:00 horas), el uso de ropa protectora o con filtros UV también son una excelente opción si estamos de vacaciones y no podemos evitar el sol".
Además de mantenerse hidratado y reaplicar el protector cada dos horas, la experta subraya la importancia de usar sombreros y gafas de sol. "Hay que tener en cuenta que cuando la piel luce 'bronceada' y ni que hablar 'roja' es debido a que ya hay daño solar presente. El daño solar es el que nos lleva a un envejecimiento prematuro, manchas en la piel, piel apagada y en algunos casos puede dar pie a un futuro cáncer de piel", afirma.