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Tras ser mamá el pasado 14 de julio, Cristina Pedroche confesó que estaba en "una nube de amor", y así sigue. La presentadora madrileña, de 34 años, está disfrutando al máximo de estas primeras semanas en casa con su bebé y, aunque prefiere mantener a la pequeña Laia totalmente alejada del foco mediántico, sí que está compartiendo algunas fotos y reflexiones sobre la montaña rusa de emociones que está viviendo. Cristina tuvo un parto natural y sin epidural, tal y como ella quería. "Todo lo que me imaginé se quedó muy corto, tanto el proceso de acompañar a mi hija a nacer como sus primeras horas de vida", dijo emocionada.
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Las olas uterinas
Dar a luz a su hija fue, en sus propias palabras, "la experiencia más brutal, mágica y real de mi vida". Por eso, ha decidido tatuársela en la piel. La mujer del chef David Muñoz ha compartido esta foto en la que muestra orgullosa el nuevo diseño que se ha hecho en honor de su hija Laia.
"Mis olas uterinas me trajeron a mi hija... ya siempre conmigo en mi piel y en mi corazón ♥️ ?. Gracias @cajatattoo por tu arte ??❤️", ha dicho mencionando al artífice de su tatuaje, que ha trabajado con rostros tan conocidos como María Pombo, Ester Expósito, Manu Ríos o Ana Guerra. Y, por supuesto, gracias @partopositivo por hacerme creer en mí, en mi poder, en que podía superar los miedos y en que soy la mejor madre que mi hija podía tener", es el bonito mensaje que ha publicado.
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Su comentada decisión
Hace unos días, la presentadora de Password estuvo respondiendo a algunas preguntas que le hicieron sus fans precisamente para saber cómo había sido su parto, y ella hizo referencia a lo importante que había sido el agua: "Mi matrona me recomendó meterme la pelota de pilates en la ducha y la verdad que me alivió bastante (...) El agua me ayudó a sentirme menos pesada y, aunque la intensidad era cada vez mayor, me ayudaban bastante los masajes con presión en la zona lumbar cuando venía la contracción''.
Respecto al hecho de no usar epidural, que es un tema que ha generado un gran debate entre sus fans, la colaboradora de Zapeando explicó: "Estaba muy tranquila y no me acordé de ella. En el curso de hipnoparto me enseñaron muchísimos recursos para gestionar el dolor y yo me construí mi propia escalera par ir eligiendo una cosa u otra según fuera aumentando la intensidad de las olas uterinas, y la epidural estaba la última de mi lista. No me tuvieron que poner ninguna medicación, ni tuve desgarro, un pequeño punto que ya se ha reabsorbido".
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Semanas de muchas alegrías
La llegada de Laia ha coincidido con un momento profesional muy importante para Cristina. El pasado viernes se estrenó la nueva edición de Password y ella no puede estar más emocionada de estar al frente del mítico concurso. "Llevaba mucho tiempo deseando dar un paso más en mi profesión y cuando me propusieron presentar Password ya estaba embarazada de muy poco, nadie lo sabía, y la verdad es que al principio dudé. Dudé de si podría y de si lo haría bien. Menos mal que tuve un gran apoyo tanto por la cadena, la productora, amigos y familia, y acepté", ha contado emocionada.
La esposa de David Muñoz ha recordado que, cuando lo grabró, estaba de casi cinco meses: "Echo la vista atrás y creo que nunca me había sentido tan especial y con una energía más bonita. Tener en mi tripa a mi hija me hacía sentirme más segura, me daba fuerza y hacía que se me olvidaran las largas horas de rodaje. Me acostaba y me levantaba con una gran sonrisa. Ahora pienso que cuando ella lo vea y sepa que estaba dentro de mí se sentirá orgullosa de su madre y esto hace que me explote el corazón. Este programa ha sido y es mi sueño. Y ahora por fin lo comparto con todos vosotros. Gracias por acompañarme/acompañarnos".