La Semana de la Alta Costura de París es, posiblemente, el momento del año en el que realmente somos testigos del savoir faire en términos de lujo, arte y artesanía del que es capaz la industria de la moda. Desde el 3 hasta el 6 de julio, la capital francesa aumenta, si cabe, su poder de seducción y sus rincones se convierten en escenario del despliegue de virtuosismo de firmas como Dior, que ha convertido el Museo Rodin en el punto de encuentro más exclusivo de la ciudad con su directora creativa, Maria Grazia Chiuri, mostrando su colección homenaje a las diosas de la mitología. Aunque la gran fiesta de la moda no se acaba aquí para la casa francesa, pues han inaugurado su Dior Spa Cruise que permanecerá abierto hasta el 14 de julio. Durante el crucero, los pasajeros disfrutan de una travesía de dos o cuatro horas por el Sena con tratamiento facial o corporal de 60 minutos incluido. Natalie Portman, Alexandra Daddario, Maria de la Orden o Natalia Vodianova (impecable con total look de la firma), ya han subido a bordo del barco más chic.
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Relajación de diseño
Así es la cubierta del spa flotante que Dior ha inaugurado durante la semana grande de la moda y en el que cualquiera que reserve plaza, podrá disfrutar de momentos de relajación y belleza a bordo de una impresionante cubierta dominada por la simbología de a firma, hasta la piscina está forrada con el emblemático estampado blanquiazul. Chupitos a base de agua de rosa, flor de cerezo, colágeno y acerola, galletas elaboradas con té matcha, bombones healthy... Los aperitivos son solo el preámbulo del plato fuerte del viaje: las cabinas de tratamiento situadas en los camarotes del barco.
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Tratamientos punteros
La experiencia de bienestar más exclusiva culmina con una carta de tratamientos faciales y corporales que se realizan tanto en cabinas individuales como en dobles. La mejor orientación a la hora de elegir el protocolo de una hora perfecto son sus programas -Detox, Balance, Reverse Aging, Power y Relaxation-, que han sido específicamente diseñados para responder a las necesidades específicas de cada pasajero: el primero se consigue a través de un masaje remodelador, el New Look, zumo detoxificante y una clase de flow o de HIIT (entrenamiento por intervalos de ata intensidad).
Seguimos con un tratamiento corporal que se centra en restaurar los niveles de energía y una sesión de yoga flow. Para el tercero han pensado en el facial Dior Prestige Haute Précision con poderes remodeladores e iluminadores, zumos antioxidantes y rutina de mobilidad para mejorar la flexibilidad. El bautizado como Power ayuda a recuperar vitalidad y seguridad en uno mismo a través de un corporal que drena los tejidos y relaja tensiones, o el facial Kobi Dior, inspirado en la estimulante técnica japonesa, además de un entrenamiento de pilates. Por último, Relaxation propone un masaje corporal lento y envolvente, zumo de serenidad y sesión de estiramiento postural y respiraciones. En definitiva, una promesa de belleza recorriendo la ciudad que tanto amaba Christian Dior.