Debby Ryan, la exchica Disney que nos inspira los mejores peinados para pelo rizado

Para quienes no la conozcan, Debby Ryan es una exchica Disney que se convirtió en una de las niñas bonitas de la factoría gracias a series como Zack y Cody: Todos a bordo, junto a los gemelos Cole y Dylan Sprouse, o Jessie, donde interpretó el papel protagonista durante cuatro años. Al igual que otras de sus compañeras de la cadena como Selena Gomez, Miley Cyrus, Zendaya o Hilary Duff, también mantiene su estatus como ídolo de masas tras su éxito entre el público infantil y a día de hoy arrasa en redes con sus más de 16 millones de seguidores y una trayectoria profesional que se consolida gracias a la película Shortcomings, comedia inspirada en el cómic del mismo nombre que ahora se presenta en el Festival de Sundance. En el estreno, Debby ha lucido un estilo cuidadosamente desenfadado del que sacamos las mejores ideas para presumir de rizos con peinados en clave Rock and Roll. 

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El semirecogido con sorpresa

Hablamos de uno de los peinados del momento por su versatilidad a la hora de crear los looks de invitada más rejuvenecedores y por ofrecer la mejor solución a quienes no se ven con el pelo recogido pero quieren  llevar el rostro despejado a un evento. Sin embargo, esta opción esconde un truco que nos revela su verdadera naturaleza cuando la actriz se da la vuelta: lo que parece un semirecogido ladeado son en realidad dos trenzas capaces de mantener los rizos disciplinados y libres de encrespamiento. 

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La belleza de las trenzas de raíz

Katie Holmes, Gigi Hadid, Georgina Rodríguez, Victoria Beckham, Bailey Bass... Todas han caído rendidas ante los trenzados por su aspecto artesanal y lo bien que funcionan para todo tipo de ocasiones. Debby también y así lo ha demostrado en el estreno de su nueva película en Sundance donde, al darse la vuelta, lo que confundimos con un semirecogido son dos trenzas de raíz adornadas con imperdibles y pequeñas estrellas cristalizadas. Como detalle aún más especial, el final de cada recogido se asegura con un mechón del propio pelo para camuflar la gomilla.

Moño 'nudo'

Una de las grandes ventajas del pelo rizado es lo fácil que mantiene la forma y el volumen que consigue en cualquier peinado. En este caso, Debby nos propone un look ideal para las invitadas más románticas y que consiste en anudar sobre sí mismo el propio cabello hasta formar un moño del que se escapen los últimos centímetros. Lo mejor de este y prácticamente todas las propuestas de la actriz es que no se busca un acabado perfecto, lo que permite mucho margen de error. 

Con accesorios

Para esos días en los que los rizos no cooperan y hagas lo que hagas no consigues la disciplina, el brillo o el acabado que buscas, los sombreros se convierten en aliados naturales. La razón es sencilla: el mero hecho de cubrir la cabeza con un accesorio ya controla el frizz y permite llevar el pelo suelto a pesar de la humedad. Si además se aplica un aceite capilar nutritivo de medios a puntas, el look se mantiene tan perfecto y los bucles tan definidos como los de Debby Ryan. 

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Dos coletas

Otro ejemplo del extra de volumen que le dan los rizos a cualquier peinado son las dos coletas que tanto nos recuerdan a la etapa de la infancia y que nuestra protagonista lleva con un "efecto despeinado" que suma aún más frescura al look. En el caso de tener el pelo liso, aplicar productos texturizadores o dormir toda la noche con las trenzas que ondulan la melena sin necesidad de calor son algunos recursos con los que conseguir un acabado con más cuerpo.

El flequillo también se lleva rizado

Uno de los miedos que tienen las chicas con rizos a la hora de atreverse con los flequillos de moda es la necesidad de utilizar secador o plancha a diario para que el corte quede bien. La actriz nos demuestra que el trabajo extra no será necesario si se cuenta con un experto que dé con la forma adecuada, de hecho, la textura añadida ayudará a conseguir ese estilo roquero del que ella es toda una experta quizás por estar casada con Josh Dun, batería del grupo Twenty One Pilots.

Con melena 'midi'

Los cortes de pelo de máxima tendencia como el clavicut también son más que bienvenidos con melenas a todo volumen y el resultado es tan rompedor e hipnótico como nos demostró Debby en París. El look, a la altura de las clavículas y con el largo despuntado, funciona especialmente bien con el flequillo por encima de las cejas que enmarca los rasgos y centra toda la atención en la mirada.

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Rizos marcados

Con un acabado parecido pero con mayor longitud, los bucles le aportan frescura y desenfado a las melenas largas y desde la marca de cosmética natural 100% especializada en rizos, Biosakure, recomiendan el finger coiling para fijar aún más su forma: "Es una técnica que consiste en definir y dar forma a los rizos con los dedos. Se hacen  movimientos en espiral desde la raíz y en cada mechón del cabello". 

'Mullet'

Los semirecogidos con pelo rizado consiguen un efecto muy parecido al del mullet que arrasaba en la época de los 70 y 80 con embajadores tan icónicos como David Bowie: "Se caracteriza por llevar tanto el flequillo como los lados delanteros del cabello más cortos que el resto de la melena. Es decir, juega con dos extensiones de largura del cabello", apunta Michel Pineda, estilista del salón Isamar Studio, quien añade que "es una opción ideal si quieres romper con tu corte clásico habitual, siendo el estilo asimétrico perfecto para las más inconformistas". 

Ondas pulidas

Además de la textura rizada que nos inspira una infinidad de peinados y cortes, también lleva ondas surferas en las que la zona superior se alisa para conseguir uno de los looks más repetidos en las alfombras rojas y los que eligen las invitadas que quieren llevar el pelo suelto a un evento. Lo mejor es que con la naturaleza propia del cabello de la artista se mantiene la forma durante mucho más tiempo que si tuviera pelo liso, aunque haya que alisar previamente la melena para después ondularla. 

Recogidos

Por último, nos fijamos en este peinado que enmarca los rasgos al dejar sueltos los mechones más cercanos al rostro, pero despeja los largos al recogerlos en un moño que sienta especialmente bien cuando se lleva la espalda al aire. Como toque final para mantener intacto este y cualquier otro tipo de peinado, se vaporiza laca una vez terminado y siempre a 20 centímetros de la cabeza.