Cuando se está de vacaciones, nos relajamos a nivel físico y mental y, entre otras cosas, dejamos de realizar rutinas tan importantes como es el cuidado de nuestra piel.
Durante los días de descanso, muchas personas no están en su vivienda habitual, por lo que es más difícil seguir la rutina diaria que utilizamos durante el resto del año, por falta de productos y hasta de útiles más simples como pueden ser los mismos espejos, algodones o pinzas de depilar.
Siempre se olvidan las mismas cosas cuando nos hacemos la maleta... y "para cuatro días" no te lo compras, así que los cuidados ya no son los mismos. Esta relajación en el cuidado de la piel va a conllevar una necesidad absoluta de puesta a punto tras las vacaciones.
El exceso de sol, como todos sabemos, provoca una cascada importante de radicales libres, las sustancias más dañinas para la sobrevivencia celular y la preservación del ADN celular. El exceso de sol continuado y con poca protección puede provocar a su vez la formación de manchas en la piel, como son los lentigos, pecas o melasmas.
- Consejos para cuidar la piel con el paso de la edad
La elevadas temperaturas han podido provocar vasodilataciones y la aparición de pequeñas arañas vasculares. El contacto continuo del agua de piscinas cloradas suele provocar más sequedad en la piel y facilidad de descamación. Así, el agua de mar suele ser muy beneficiosa para la piel, sobre todo si está limpia, sino lo está puede provocar la formación de pequeñas infecciones en la piel como granitos u otras alteraciones.
Algo que muchos no saben es que los desplazamientos en avión provocan una gran sequedad en la piel, sobre todo en viajes largos. Y los aires acondicionados también provocan gran sequedad en la piel.
Por suerte, para contrarestar estos puntos tan perjudiciales, durante el verano aumenta la necesidad de beber agua y se ingieren más cantidad de frutas con gran aporte líquido.
Hay enfermedaes como la psoriasis, el acné y otras dolencias parecidas, como la dermatitis seborreica, que con el sol mejoran mucho, aunque al parar esta exposición solar es muy frecuente que haya un nuevo rebote y se agrave la situación. En definitiva, es una época en la que la piel sufre más, en líneas generales.
Qué cuidados vamos a necesitar
Lo más urgente, es la limpieza en profundidad. Si se puede hacer en un centro de estética, es mucho mejor, ya que tratarán la piel más en detalle. Si no es así, lo ideal es dedicarle tiempo en casa, una hora mínimo.
Aconsejo que se empiece con una limpieza en forma jabonosa y un peeling en profundidad o scrub. Posteriormente, la extracción: se trata de limpiar los poros, es difícil hacerlo en casa, pero para ello lo más recomendable es comenzar con humedecer la piel con agua templada y tamponar con una toalla húmeda. Con ello podremos reblandecer los poros sucios y serán mucho más fácil de extraer. El limpiador de Eve Lom es uno de los más adecuados para este tipo de limpieza.
- Para las pieles más grasas, una mascarilla de arcilla verde es lo que más recomiendo. Las mascarillas de sílice coloidal Leorex me gusta mucho.
- Para las pieles más secas, como no se ensucia tanto el poro, el mismo exfoliante arrastrará las impurezas.
Finalmente hidratar la piel, que es el mejor método para recuperar el estado de la misma.
Para las pieles grasas no se necesita un producto muy graso sino hidratante y que aporte agua, es por ello que lo ideal es utilizar un serum o cremas tipo gel. Sin embargo, para las pieles más secas es necesario dar un aporte más emoliente y cremoso.
Es por ello si las mascarillas recomendadas en la piel grasa son las de arcilla, en estos momentos aconsejo una mascarilla con ácido hialurónico. Me gustan mucho las mascarillas de los laboratorios Hyalogic, que están impregnadas en ácido hialurónico y son especificas estas pieles.
Posteriormente, como uso diario, aconsejo los sérum a base de vitamina C para dar luminosidad a la piel e ir eliminando las células muertas. Cuando vaya desapareciendo el bronceado es el momento de empezar a tratar las manchas de la piel con geles a base de ácido kójico y ácido fítico y hidroquinona (este último bajo recomendación médica).
Para las arañas vasculares que hayan podido aparecer, lo ideal son las cremas o gel con óxido de vitamina K1, que actúan como antihemorrágica y en consecuencia la eliminación de estas vasos. Son pocas las marcas que elaboran este tipo de cosméticos, el laboratorio Auriga, Auriderm, es uno de los pioneros.
- El estrés y sus efectos en la piel
No nos hemos de olvidarnos del pelo, que en estos momentos necesitará un cuidado extra, ya que suele haber sufrido bastante. Para ello las mascarillas a base de aceite de Argán o Monoi de Tahiti, o incluso el mismo aceite durante unos veinte minutos con un envoltorio posterior de una toalla húmeda algo caliente.
Para el cuerpo aconsejo utilizar un exfoliante corporal y una hidratación posterior. En estos momentos, la piel tiende a ir descamando las células muertas, por lo que después de la exfoliación, lo más aconsejable es utilizar cremas con gran capacidad emoliente, con urea o que contengan elevado contenido en ácidos grasos tipo omega 3 o 9.
El agravamiento del acné se produce a que el sol ha estado actuando como antiséptico y secante de la piel, haciendo desaparecer tanto la seborrea como la elevada cantidad bacteriana que suelen padecer este tipo de pieles. Para evitar que se produzca este empeoramiento, se debe limpiar la piel diariamente por la mañana y por la noche con un jabón astringente y a ser posible bacteriostático, utilizar un tónico posteriormente (siempre con un algodón) y usar un gel con peróxido de benzoilo directamente en las lesiones o con clindamicina (antibiótico, bajo recomendación médica).
Para la psoriasis, igualmente durante los meses de verano, gracias al sol y a los baños de mar, esta enfermedad mejora, por ello se aconseja hacer alguna sesión con rayos UVA, para evitar el parón repentino de esa terapia natural. También es importante procurar mantener la piel muy hidratada y actuar inmediatamente que se empieza a formar la lesión, ya sea con cremas altamente emolientes o con ligera cantidad de hidrocortisona.
'No queremos perder el moreno, que favorece mucho'
Una piel altamente hidratada mantendrá durante más tiempo el bronceado, en este momento son muy útiles las cremas con un ligero contenido en auto-bronceador. Son cremas prolongadoras del bronceado, suelen contener DHA. O simplemente aplicar una vez a la semana un autobronceador, aunque hay que tener en cuenta que estos productos secan algo la piel así si la piel esta algo deshidratada es aconsejable alternarlo con lociones muy cremosas.
Si durante el verano se ha estado tomando suplementos con betacarotenos aconsejo continuar tomándolos durante aproximadamente un mes más, aunque ya no se tome el sol, ayudará a mantener el tono bronceado así como mejorar la hidratación de la piel.
En cualquier caso, los suplementos con vitamina E y ácidos grasos Omega 3 también son muy necesarios en esta época del año.