Conociendo la personalidad tan arrolladora de Miley Cyrus, ¿quién diría que tiene inseguridades? Si hay algo que caracteriza a la cantante es que derrocha una fuerza increíble y parece no tener complejos. Sin embargo, también es humana y durante estos últimos años ha vivido momentos complicados en los que perdió la confianza en sí misma. Al parecer, todo comenzó en los MTV Video Music Awards de 2013, cuando hizo una una de sus actuaciones más polémicas junto al cantante Robin Thicke. "Estuve dos o tres años sin ponerme pantalones cortos. Dejé de ponerme faldas en el escenario... y todo fue porque después de los VMA y de llevar mi bonito conjunto nude, todos empezaron a compararme con un pavo".
"Estaba tan delgada y tan pálida...", confesó Miley en sus redes en un directo que compartió con la también cantante Demi Lovato. "Me sentía tan mal conmigo misma que no me puse biquini durante dos años. Nadie pensó que todo eso me afectaría de alguna manera (...) Los memes pueden ser muy divertidos, pero también pueden ser muy dolorosos", explicó, asegurando que "cuando se trata de ti, no es tan divertido". "La gente hizo todas esas bromas y, para mí, fue una llamada de atención para usar lo que tenía a mi alcance para un propósito más grande. Fue entonces cuando comencé la Fundación Happy Hippie, porque necesitaba algo más grande que esta industria que me hacía sentir tan mal conmigo misma".
La cantante asegura que lo que vivió en aquel momento marcó su vida y se dio cuenta de que podía ni quería seguir así. "Creo que tenía 21 años, empezaba entenderme a mí misma como una persona independiente y era muy doloroso sentirme tan avergonzada de mi cuerpo. Realmente afectó a mi vida personal. Mi sello siempre ha sido no pedir disculpas por lo que hago y estar segura de mí misma, por lo que lo peor que podía hacer por mis fans era mentirles o ser un fraude", dijo Miley, que se mostró más sincera que nunca al hablar de sus complejos. "Me di cuenta de que intentar ser la chica más segura del planeta era en realidad un engaño, porque en verdad me sentía tan mal que ni siquiera podría llevar bañador o pantalones cortos. Y cuando iba con leotardos o medias, me ponía cuatro pares porque me sentía muy insegura".
Ahora que ya han pasado siete años, parece que la cantante ha recuperado la confianza en sí misma y ya no se siente acomplejada de su cuerpo. De hecho, hace unos meses sorprendió a sus fans publicando una sesión de fotos de lo más sugerente en la que salía presumiendo de tipazo en bikini. Miley aprovechó la escapada al Gran Cañón del Colorado que hizo con su familia para responder a algunos haters que aseguraban que estaba demasiado delgada. "Sigue moviéndote, sigue escalando" o "Si me miras fijamente... puedes verlo en mis ojos... esta chica siempre encontrará su camino", fueron algunos de los mensajes que publicó.