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Muchas mujeres, al poco de tener hijos, optan por cortarse el pelo -algo también conocido como fenómeno mom hair-, para poder tener más comodidad que si llevaran la melena larga o para poder arreglarlo en menos tiempo, ya que un bebé necesita plena atención. Pero también, a su manera, las royals pueden sentirse identificadas con esta práctica según hemos podido averiguar analizando los peinados del Trooping the Colour de este año. Para el desfile matutino, en honor a la reina Isabel, el protocolo es bastante formal requiriendo tocado o sombrero, algo que puede funcionar tanto con cabello suelto como con un recogido por lo que hemos visto. Sin embargo, este sábado, con la reaparición de Meghan Markle después de su baja maternal, ha quedado claro que, tras convertirse en madres, el moño es el hairstyle oficial para la solemne celebración, una costumbre que inició hace unos años Kate Middleton.
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Con sobrada experiencia en la celebración anual que reúne a la Familia Real británica -en la que Kate Middleton participa desde 2011 como podemos ver bajo estas líneas-, ha sido, año tras año, un ejemplo de estilo y distinción. Su peinado preferido, hasta que llegaron sus hijos a posar junto a ella en el balcón, siempre había sido llevar la melena suelta con ondas en las puntas para darle movimiento. Sin embargo, en cuanto los pequeños George y Charlotte de Inglaterra se unieron a la celebración, la duquesa de Cambridge empezó a recoger su melena en elegantes y voluminosos recogidos.
Para la mujer del príncipe Guillermo es fundamental que el peinado se coordine con la orientación de los tocados logrando como resultado una imagen final muy equilibrada, es decir, llevando el pelo al lado contrario que el complemento. Una elección que no solo le permite poder cogerles en brazos sin preocuparse por estropear el acabado de su look sino que, también es sabido que son estos moños los que suman puntos de elegancia a cualquier combinación.
Aunque de Meghan Markle tenemos menos casos a los que remontarnos -solo lleva apareciendo en el balcón real estos dos últimos años-, han sido suficientes para descubrir la fórmula de las duquesas. En su debut, un vestido rosa con los hombros al aire, tocado ladeado y ondas despeinadas formaron el estilismo que escogió para aparecer por primera vez después de su matrimonio con el príncipe. Un año después, y tras tener al pequeño Archie Harrison, no solo ha optado por un vestido más sobrio, sino también por un cambio de look.
Subida en el carruaje, Meghan volvía a conquistarnos con el cabello recogido en un moño bajo, el mismo peinado que lleva luciendo su cuñada desde que aparecieron los pequeños príncipes en escena. Y si bien no sabemos todavía el hairstyle que llevará en el próximo cumpleaños de la reina Isabel II, viendo que ha tomado nota del ejemplo de Kate Middleton, es más que probable que la veamos repetir de recogido en el estreno de su hijo.
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