Una de las claves del método Pilates es que se trabaja todo el cuerpo, ayudándonos a fortalecer la musculatura, mejorar la postura y aliviar los dolores de espalda. Pero, además, si lo practicamos con máquinas, se convierte en uno de los entrenamientos más completos para remodelar y estilizar la figura, entre otras ventajas. ¡Toma nota!
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- Practicar Pilates con máquinas nos permite realizar un ejercicio menos exigente y adaptado a cada necesidad. Si, por ejemplo, no puedes mover la pierna, no significa que no puedas realizar otros ejercicios. Se podría utilizar el Cadillac -una de las diferentes máquinas especiales de Pilates, en forma de cama- que, mediante sus cuerdas, palancas y poleas va a contribuir a mejorar la movilidad. El objetivo es ir siempre hacia la máxima autonomía de la persona.
- Si lo que quieres es entrenar duro, las máquinas de pilates nos retan con cargas y ángulos imposibles y nos abren un universo de nuevos ejercicios que no sería posible realizar de otra manera. Por ejemplo, la Reformer, la máquina más famosa de Pilates se pueden llegar a hacer más de 80 ejercicios para trabajar zonas como piernas, caderas, abdomen y pecho y ganar flexibilidad en la espalda.
- Estimularás tu cuerpo y tu mente. Es una forma inspiradora de hacer ejercicio, que supone un reto para el cuerpo y despierta nuevas sensaciones en nosotros. Además, como el yoga y otras técnicas que prestan atención a la respiración, Pilates también trabaja la concentración; lo que va a favorecer la reducción del estrés.
- Una de las mejores soluciones para el dolor de espalda. Las máquinas nos van a ayudar a adoptar una mejor postura y a acomodar el cuerpo para no forzarlo al realizar los ejercicios. Por ejemplo, la colocación correcta de los hombros, que por sí sola se hace difícil, nos costará menos con máquinas como el Barril. Su finalidad es favorecer el estiramiento de la columna vertebral y fortalecer la musculatura de la espalda, que incide directamente sobre la postura. Este equipo se usa también para la realización de varios ejercicios de equilibrio y es una opción perfecta para iniciar un programa de Pilates con máquinas.
- Permite trabajar zona pélvica. Muy pocas veces se nos habla de la importancia de fortalecer la musculatura del suelo pélvico, que puede sufrir durante la práctica de otros ejercicios de gran impacto como el running, levantamiento de pesas…; o, simplemente, por el paso del tiempo. Para realizar ejercicios específicos de esta zona, puedes utilizar otra de las máquinas de Pilates, la Silla, pensada para trabajar glúteos y zona pélvica. Además, también permite ejercitar hombros, dorsales y trapecio y mejora la coordinación. Aunque, con el entrenamiento de suelo también podremos poner en práctica algunos de los consejos que puedes leer en este artículo: ¿Cómo podemos entrenar el suelo pélvico?
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