¿Eres de esas mujeres que, como Ariel Winter, mima y cuida su melena a diario? Seguro que estás muy pendiente de las necesidades de tu cabello y usa un champú adecuado, así como mascarilla todas las semanas pero, ¿crees que lo haces todo bien? Te habrás dado cuenta de que, en ocasiones, por mucho que hagas las cosas bien los resultados no son los esperados, y es ahí donde llega la gran pregunta, esa que ni tú misma te habrás llegado a plantear: ¿cuidas de tu cuero cabelludo? Si quieres presumir de una bonita melena como la actriz de Modern Family tendrás que añadir un nuevo punto a tu rutina: la exfoliación.
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Solemos olvidar que el cuero cabelludo también es piel y tenemos que tratarla como tal prestándole la atención necesaria. Así, al igual que llevas a cabo este paso con tu rostro y el resto de tu cuerpo, la exfoliación es, también, un punto imprescindible para tu melena. Antes de volverte loca y frotar tu cabeza, debes conocer cómo hacerlo de forma correcta y, sobre todo y muy importante, en qué ocasiones llevarlo a cabo, ya que no se trata de un tratamiento diario sino puntual. Toma nota de estas claves y comienza a cuidar tu melena de una vez por todas.
Cómo y cuándo exfoliar tu cabello
¿Por qué es importante llevar a cabo este paso? Muy sencillo: porque favorece el crecimiento del pelo y evita su caída, dos puntos muy importantes para cualquier mujer. Mantener la base de tu cabello limpia y sana hará que tu melena luzca perfecta. Al llevar a cabo la exfoliación estamos oxigenando el cuero cabelludo y ayudamos a desobstruir los poros eliminando las células muertas y el exceso de grasa, sebo y suciedad. Además, el correspondiente masaje con el que la llevarás a cabo activará la circulación sanguínea favoreciendo la llegada de nutrientes al cabello.
Pero, ¡ojo! no debes hacerlo cada vez que te lavas el pelo, ni siquiera una vez por semana, lo mejor es llevar a cabo una cada 15 días en cabellos con exceso de grasa y, en el caso de cabellos normales, una vez al mes. El mejor momento para realizarla es antes de aplicar el champú, así combatirás primero una posible descamación. Para asegurarte de que haces lo correcto es mejor acudir previamente a la peluquería para que un profesional te asesore una vez haya visto tu cabello. Es muy importante que uses productos específicos para el pelo, si se te estaba pasando por la cabeza usar el mismo exfoliante que aplicas en tu rostro o cuerpo... ¡deshecha la idea!
Si te excedes con este procedimiento el remedio podrá ser peor que 'la enfermedad', ya que masajear en exceso el cuero cabelludo estimulará la secreción de las glándulas sebáceas lo cual dejará más grasiento tu pelo.