Micropigmentación o tatuaje de cejas, ¿qué técnica es mejor? Conoce sus diferencias
Si estás buscando una técnica para dar forma y rellenar tus cejas poco pobladas, pero no sabes por cuál decidirte, toma nota de las principales diferencias entre dos de las más comunes: la micropigmentación y el tatuaje
Los avances en tratamientos beauty han hecho que lucir unas cejas definidas, pobladas y perfectas sea posible mediante técnicas muy sencillas y cada vez menos agresivas. Son muchos los problemas que pueden llevarnos a tener unas cejas poco pobladas o muy finas desde una mala y excesiva depilación e ingesta de ciertos medicamentos hasta determinadas enfermedades. Seguro que si has tenido alguna de estas complicaciones te has podido informar acerca de las diferentes opciones del mercado: tatuajes, micropigmentación y la más novedosa el microblading, pero ¿conoces cuáles son las principales diferencias entre los dos primeros procedimientos que surgieron? Descubre en qué consiste cada una y después podrás tomar una decisión acertada.
Diferencias entre micropigmentación y tatuaje
La primera diferencia obvia es la duración de los resultados. Así como el tatuaje sí es realmente permanente, la micropigmentación es algo temporal que puede durar entre 1 y 3 años dependiendo de los pigmentos utilizados, la edad y el tipo de piel del paciente. Para hacer los tatuajes que llevas a modo de decoración o símbolo en tu cuerpo, así como aquellos que haces en tu rostro los profesionales utilizan máquinas cuyas agujas pueden llegar a una profundidad de unos 2mm por debajo de nuestra piel alcanzando así la dermis de ahí su duración en el tiempo y también de que con el paso de los años se produzca un efecto borroso como consecuencia de la dispersión de la piel.
En cambio las que se usan en la micropigmentación solo llegan alrededor de los 0,2/0,5mm quedándose en la epidermis. La piel del rostro es mucho más delicada y fina que la del resto del cuerpo y es por ello que con el paso de los años se ha ido buscado la forma de mejorar la calidad y los resultados de este tipo de técnicas que dibujan y mejoran rasgos que pueden cambiar por completo una expresión lo que hace imprescindible conseguir acabados naturales con los que los clientes se queden satisfechos ya que su felicidad y autoestima están en juego. Por todo esto la cicatrización de esta segunda técnica es más rápida.
Otra de las diferencias reside en los pigmentos. Los utilizados para la micropigmentación deben ser hipoalergénicos para evitar posibles reacciones adversas, además son bastante más selectivos y deben cumplir una serie de requisitos para que sanidad los apruebe, solo son escogidos como aptos aquellos formados por partículas más pequeñas cuya base es en aceite en lugar de alcohol, de ahí su fácil expulsión.
Tras conocer sus diferencias tienes que tener muy claro que si no deseas arriesgarte en exceso es mejor decantarte por la micropigmentación ya que si el diseño de tus cejas no te convence siempre podrás mejorarlo y retocarlo una vez desaparezca, además los resultados son mucho más naturales ya que puedes optar por sombrear las zonas poco pobladas o dibujar pelo a pelo.