Taylor Swift y los secretos de una piel perfecta: Cómo cuidar tu rostro antes de los 30
Si quieres retrasar la aparición de los signos de envejecimiento todo lo posible, debes comenzar a cuidar de tu piel cuanto antes, ¿cómo? Aquí tienes los puntos clave.
¿Eres consciente de que tu piel no va a estar tersa y perfecta siempre? aunque creas que no debes seguir una rutina beauty antes de los 30 estás muy equivocada, cuanto antes comiences a cuidarte, mejor llegarás a la madurez. Taylor Swift a sus 27 años puede presumir de tener un rostro dulce, angelical y cuidado, y es que la artista se toma muy en serio tanto su alimentación (una dieta equilibrada y sana es fundamental para tener una piel hermosa) como el cuidado de su cuerpo. Si tú también quieres comenzar a cuidarte, toma nota de los consejos de belleza a incluir en tu día a día.
Rutina 'beauty' para mujeres menores de 30 años
En primer lugar, debes saber que a partir de los 25 años la regeneración de la piel empieza a ralentizarse, surgen los primeros signos de envejecimiento y se reduce la producción de colágeno y elastina, lo que provoca que tu piel pierda tersura, luminosidad y brillo. No pienses que las cremas antiarrugas son solo para mujeres que pasan los 40, si quieres conservar la juventud de tu rostro durante más años empieza a usarla desde los 25.
Pero, incluso, antes, debes tener claro que hay tres pasos básicos que deberás incluir en tu día a día desde el momento en el que comienzas a coquetear con el maquillaje.
- La limpieza. Para cuidar de tu rostro lo primero que debes hacer es llevar a cabo una correcta limpieza, y eso incluye desmaquillarte, cada día, usando productos adecuados. Deja las toallitas desmaquillantes para ocasiones puntuales y apuesta por el agua micelar o la combinación de leche, para retirar los restos de tu make up, y tónico para cerrar los poros, y hazlo, siempre, a toquecitos y no arrastrando. Al llegar a la zona de los ojos no olvides hacerlo con movimientos suaves y sin apretar en exceso. También tendrás que usar exfoliantes una o dos veces a la semana para eliminar los restos de suciedad que obstruyen los poros, así como la piel muerta.
- La hidratación. Así como tu organismo necesita agua diariamente para ponerse a punto, tu piel necesita que la hidrates todos los días. Una vez tengas claro qué tipo de piel tienes (seca, mixta o grasa) debes buscar aquella crema que mejor se adapte a tus necesidades y usarla dos veces al día, por la mañana y por la noche tras desmaquillarte.
- La protección solar. Que nunca te falte este paso, es uno de lo más importantes y del que más nos olvidamos, sobre todo en invierno, pero debes ser consciente de que los rayos del son uno de los principales impulsores del envejecimiento de la piel, además, favorece la aparición de manchas. Da igual la época del año que sea, añade una crema solar en tu neceser.
A medida que te acerques a los 30 puedes comenzar a usar también un contorno de ojos. La densidad de la piel en esta zona es menor a la del resto de la cara, por ello necesita más cuidados y atenciones. Si te has decidido a comprar uno debes saber que este producto conseguirá retrasar la aparición de las odiadas patas de gallo. Por último, no escatimes a la hora de comprar tu maquillaje, es mejor apostar por productos de calidad que incluyan hidratación y protección, sobre todo, si lo usas a diario.