La utilización de los tatuajes como una forma de embellecer el cuerpo, bien sea como manifestación artística, como con fines terapéuticos, es una técnica que se viene practicando en muchas culturas desde tiempos ancestrales. Tal vez por eso, en esa búsqueda continua por exaltar la belleza, evoluciona hasta convertirse en una técnica de maquillaje permanente a la que se someten muchas mujeres, y una de las áreas más demandadas a la hora de utilizarla es precisamente la de las cejas. Ya sea por una cuestión de naturaleza, porque se te ha ido la mano con las pinzas en alguna ocasión o a consecuencia de un tratamiento médico, puedes sufrir la escasez de pelo en esta zona o incluso la aparición de pequeñas calvas. Si por temor a que tu rostro se vea desdibujado y a perder ese marco cargado de personalidad que imprimen unas cejas pobladas estás pensando en someterte a un tatuado de cejas, antes deberías leer las ventajas e inconvenientes de este tratamiento. ¡Te las contamos!
Existen muchos beneficios ligados a esta técnica, de ahí que sean cada vez más las mujeres que recurren a ella como solución para unas cejas escasas.
- Ahorro de tiempo: Si el hecho de maquillarte las cejas forma parte de tu rutina diaria, con el tatuado podrás reducir significativamente el tiempo que inviertes en tu cuidado diario. ¡Un trabajo menos!
- Adiós, perdida de pelo: En el caso de sufrir alopecia en esta zona, podrás despedirte totalmente de ella. El maquillaje permanente ayudará a restaurar tus cejas y a devolver el marco natural de tus ojos.
- Rostro definido: Las cejas imprimen personalidad y carácter, tanto a nuestra mirada como a nuestra expresión en general. Unas cejas bien delineadas, pobladas y correctamente tatuadas pueden devolvernos la definición que había perdido dada la escasez de pelo.
- Fáciles de mantener y cuidar: Si eres de las que se maquillaba las cejas, podrás olvidarte de los temidos borrones a causa del sudor o de un mal gesto, el maquillaje permanente te evitará cualquier imprevisto.
El maquillaje permanente no está exento de tener inconvenientes y desventajas que hay que sopesar antes de someterse a él.
- ¿Dolor? En un principio se trataba de un proceso que implicaba cierto dolor —de corta duración y perfectamente soportable— que quien tenga un tatuaje en cualquier otra parte del cuerpo puede atestiguar. Sin embargo cremas que duermen los nervios se han incorporado para evitar este trance.
- Resultados inesperados: A la hora de tatuarte las cejas es imprescindible que recurras a una clínica estética profesional. Allí te asesorarán para definir la forma y el tratamiento más conveniente. Piensa que si no es así, puedes acabar con unas cejas que no te favorezcan o con las que no te reconozcas y no tendrá fácil solución a corto plazo.
- Retoques: A pesar de ser una técnica permanente que puede durar entre 4 y 10 años, es importante retocar la zona debido a la pérdida de pigmentación del color, que disminuye de forma natural a lo largo del tiempo.
- Proceso de eliminación: Al contrario de lo que sucede con el maquillaje, un tratamiento de cejas permanente no será fácil —ni económico— de eliminar en caso de error.
- Sensibilidad: Si tienes la piel excesivamente sensible, tienes algún problema dermatológico o tiendes a desarrollar queloides —lesiones en la piel generadas por un crecimiento exagerado del tejido cicatricial— házselo saber a los expertos, porque puede que este tratamiento no sea el mejor para ti.
Tras sopesar bien sus pros y sus contras, ¿sigues pensando que es la solución idónea para ti? Antes de decidirte, conoce también paso a paso dos tratamientos semipermanentes que te ayudarán a definir tus cejas: la micropigmentación y el microblanding. No hay nada mejor que estar informada.