Adapta tu dieta a tu metabolismo
¿Cuántas veces te has preguntado por qué a veces subimos de peso sin comer en exceso? ¿Por qué otras personas comen más y, sin embargo, no parecen engordar? Y es que cada cuerpo es un mundo y metabolizamos los alimentos de forma diferente; lo que implica que no todos los tipos de dieta son igual de beneficiosos según nuestra genética o características personales. Por eso, el Doctor Iván Ibañez, responsable de una Unidad de Medicina Nutricional, Ejercicio y Antiaging de la Clínica Planas, nos habla en esta entrevista de la importancia de conocer nuestro metabolismo y adaptar la dieta para alcanzar el peso ideal.
- ¿Cuál es el motivo por el que gran parte de las dietas fracasan? ¿Por qué muchas personas siguen programas para perder peso y no consiguen su objetivo aun siguiendo todas las indicaciones del especialista?
El principal motivo es que no todos metabolizamos los alimentos del mismo modo. Hay personas que queman mejor los azúcares, las grasas o las proteínas. Por lo tanto, si un paciente que quema peor los azúcares, por ejemplo, realiza una dieta para perder peso en la que reduce la ingesta de grasa pero no la de azúcares, los resultados no serán los deseados.
- ¿Qué motivos hacen que nuestro metabolismo sea más lento?
Existen muchos, pero los principales a mencionar son: el sedentarismo, la falta de masa muscular, el declive de las hormonas anabolizantes debido al envejecimiento fisiológico, alteraciones en la función del tiroides, las dietas muy bajas en calorías o que aparezca muy a menudo la sensación de hambre -ya que el metabolismo se enlentece para sobrevivir con lo que hemos ingerido (mecanismo de supervivencia)-.
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- ¿Cómo sabemos que nuestro metabolismo está funcionando correctamente?
En términos generales, podríamos decir que el metabolismo energético y balance calórico está correcto en una persona que suele mantener un peso saludable y no tiene variaciones, en cuanto a subir o bajar de peso, sin modificar los hábitos alimenticios o de ejercicio físico. Pero para conocer de manera óptima nuestro estado metabólico se debería realizar una prueba llamada estudio del metabolismo en reposo.
- ¿En qué consiste un estudio de metabolismo y cómo va a servirnos para conseguir nuestro peso ideal?
El estudio de metabolismo basal, también conocido como calorimetría indirecta, nos permite medir de forma exacta y científicamente probada, el gasto calórico en reposo de una persona. Entendemos por gasto energético la energía que necesita una persona para mantener su peso y realizar sus tareas diarias. Gracias a este estudio podemos determinar las necesidades nutricionales de una paciente, saber qué alimentación quema mejor y, por lo tanto, elaborar una dieta personalizada que se ajuste a sus necesidades.
Esta prueba es una espirometría, es decir, analiza la respiración del paciente con una tecnología específica. La combustión completa de los alimentos se realiza a través de las moléculas de oxígeno así que, analizando la respiración del paciente, podemos saber qué se está quemando mejor y crear una dieta que se ajuste a sus necesidades. En realidad cuando perdemos peso se pierde por la respiración y no por la orina o el sudor.
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- ¿También hay ejercicios/deportes con los que quemaremos más o menos en función de nuestro metabolismo?
Exacto. El ejercicio físico debe ser personalizado según el metabolismo energético durante un esfuerzo para cada persona. En términos generales, la práctica de ejercicio físico debe movilizar 2/3 partes de la musculatura general. Esto sucede en: marcha nórdica, correr, elíptica, remo… La intensidad y el tiempo también son factores determinantes a la hora de perder calorías de grasa, ya que no todo el mundo utilizar las grasas como fuente energética durante un esfuerzo a las mismas pulsaciones. Los ejercicios de fuerza muscular también son necesarios por lo que no deben ser olvidados.
- ¿Por qué de esta manera estamos cuidando también nuestra salud celular?
Estar en buena forma física asegura un buen funcionamiento mitocondrial. Es decir, las mitocondrias de nuestras células, encargadas de producir energía, realizan adecuadamente sus tareas. Si la actividad de las mitocondrias se deteriora, la persona pasa a ser más vulnerable a todo tipo de enfermedades.
- ¿En términos generales, qué hábitos saludables conseguirán activar nuestro metabolismo?
Una práctica habitual de ejercicio físico tanto aeróbico como de fuerza muscular. También una nutrición calórica adecuada a nuestro metabolismo y la toma de suplementación termogénica natural según criterio facultativo, de forma puntual y totalmente individualizada. Entendemos por sustancias termogénicas aquellas que ayudan a aumentar el metabolismo corporal: té verde, café, guaraná, citrus aurantium (llamado naranja amarga)… sin excesos y en su justa medida.
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