Siempre debemos hacer las cinco comidas al día, comiendo más o menos cantidad en función de nuestra actividad física y eligiendo unos alimentos u otros dependiendo del tipo de comida. ¿Qué quiero decir? Que los alimentos más ligeros siempre deben ir en la cena, siendo el desayuno y la comida los que aporten los alimentos más calóricos y en mayor cantidad.
Por lo tanto, las recomendaciones a tener en cuenta a la hora de cenar son:
- Deben ser ligeras pero no en exceso; ya que el cenar poco puede hacer que te acuestes con hambre -haciendo que comas por la noche, algo que engorda muchísimo; además de no ser muy saludable-. Por lo tanto, las cantidades deben ser en función de tus necesidades, pero siempre aportar proteína y verdura u hortalizas, ya sea en plato único o dos platos.
- No está recomendado ingerir hidratos de carbono por la noche; es decir, pasta, arroz, legumbres, patata, pan…Tampoco alimentos que te sean de difícil digestión.
- Evitar alimentos con alto contenido en grasas saturadas. Ya sabes, grasas malas para la salud.
- Y por último y no menos importante, debemos cenar pronto, no muy tarde ni justo antes de acostarte; ya que lo que no consigas quemar ni digerir bien, se acumulará en forma de grasa.
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