Yolanda Jiménez dietista y nutricionista de entulínea de Weight Watchers, recomienda “seguir un proceso de adelgazamiento sensato, donde la pérdida de peso se realice de manera progresiva para no padecer el temido ‘efecto rebote’ a largo plazo”. En ¡Hola! En Forma hemos recopilado 10 mandamientos claves para que la pérdida de peso funcione sin perder salud. ¡Toma nota!
- ¡No abandones! Este es sin duda el mandamiento más importante. A la hora de iniciar una dieta de adelgazamiento hay que ser constante, mantener una actitud positiva e incorporar estos hábitos saludables a nuestra dieta cotidiana. Pero, ¡ojo!, el cambio de hábitos alimenticios debe ser un proceso paulatino y nunca se debe incluir de manera radical, de lo contrario, lo más seguro es que fracasemos en nuestros propósitos.
- No te saltes ninguna comida y planifícalas. La planificación garantiza comidas equilibradas y evita caer en opciones improvisadas como platos precocinados. A su vez, el mantenimiento de los horarios nos ayuda a no sucumbir en el picoteo innecesario y poco saludable. Pero sobre todo, ¡come! No comer no nos ayuda a mantener la línea. Los expertos recomiendan comer 5 veces al día con especial atención al desayuno, que debe ser el más completo de nuestros platos (con cereales, lácteos y fruta).
- ¡Hidrátate! La hidratación es fundamental en cualquier época del año, pero además nos ayuda en el proceso de perdida de peso, porque el agua ayuda al correcto funcionamiento de nuestro organismo a la vez que elimina toxinas. Lo ideal es tomar en torno a dos litros de agua, aunque los zumos y las infusiones también suman en una buena hidratación. ¡Lleva una botella de agua siempre contigo y oblígate a beber! Una buena opción para esto es añadirle a nuestra botella de agua, trozos de frutas que le den un ligero sabor y la hagan más apetecible.
- Dedícale tiempo al sueño. Por todos es sabido que los expertos recomiendan dormir un mínimo de 7 horas diarias. ¿Pero, que tiene que ver esto con perder peso? ¡Pues mucho! La falta de sueño influye negativamente en el correcto funcionamiento del organismo y, como consecuencia, hará que no consigamos adelgazar e incluso que aumentemos de peso.
- ¡Vigila las cantidades! Sobre todo cuando comas fuera de casa. Por muy sana que sea nuestro menú, de nada nos servirá si comemos en cantidades desproporcionadas. Consulta con un especialista para que te asesore al respecto teniendo en cuenta siempre tu estatura y tu edad.
- ¡Come siempre en el plato y sentado! Los alimentos hay que saborearlos y disfrutarlos para que a nuestro cerebro le dé tiempo de asimilar que hemos comido y, de esa manera, nos sintamos satisfechos. Comer delante de un aparato electrónico o de pie hace que nos saciemos menos y, por consiguiente, que comamos más de la cuenta o menos saludable.
- Los refrescos, mejor light. No, no hace falta que dejes de tomar refrescos o alcohol (aunque deberías limitar su ingesta) pero es mejor si tomas las versiones menos azucaradas y las ‘sin’.
- Intenta compensar siempre los excesos. Si un día te pasas o te das un capricho (no hace falta privarse de ellos), al día siguiente compénsalo comiendo más ligero o realizando algún tipo de actividad física.
- ¿Y entre horas? Lo mejor es comer algo cada dos horas y de esta forma no sentiremos ese deseo de picoteo, que es otro de los grandes culpables en el aumento de peso. Y, además, no hace falta esperar a tener hambre. ¿El snack ideal? Que sea casero y poco triturado, pues la masticación aumenta la saciedad. Algunos ejemplos son: un yogur desnatado, manzanas o peras con piel cocinada al microondas con trocitos de limón, canela y pasas o bayas o cereales de avena con queso fresco.
- ¡Muévete! Practica algún tipo de actividad física. Camina a un ritmo movido al menos 30 minutos al día, refréscate en la piscina al mismo tiempo que haces unos largos, apúntate a alguna actividad grupal que te motive o ejercítate desde casa con nuestros videos. Hay un montón de opciones… ¡no tienes excusa!
Cumple con estos diez mandamientos y verás como tu cuerpo te lo agradece. No lo dejes para la próxima semana. ¡Incluye desde ya estos buenos hábitos en tu día a día!