Todos relacionamos el consumo de chocolate con la obesidad o con los problemas de acné, pero no es del todo cierto. Primero, ambas cosas son la suma de más factores ya sean malos hábitos a nivel nutricional, genéticos, ambientales o fisiológicos. Y, además, no es lo mismo el chocolate con leche, que contiene un 30% de cacao, que el amargo, que tiene un 70%. Las propiedades del chocolate puro serán siempre mucho mejores.
El chocolate, fuente de placer y bienestar
El chocolate se considera un alimento fruitivo, es decir, un alimento que al consumirlo nos produce satisfacción y felicidad debido a la serie de compuestos que contiene. Por eso, el chocolate es tan placentero y nos mejora a nivel emocional cuando estamos bajos de ánimo. Uno de estos compuestos se llama feniletilamina, perteneciente a la familia de las anfetaminas. También podemos encontrar alcaloides, sustancias que nos provocan excitación y que, en exceso, pueden llegar a provocar insomnio.
Mejor cuanto más puro
El chocolate que consumimos habitualmente es muy energético, ya que debido a que el cacao es tan amargo, la industria lo endulza utilizando grandes cantidades de azúcar, aumentando sus calorías. Pero, como se ha demostrado que el chocolate tiene unas excelentes propiedades, lo que se recomienda es que se consuma chocolate con un 70% de cacao para así aprovechar sus beneficios.
Un buen aliado en la prevención de algunas enfermedades
El chocolate, aparte de tener un alto valor calórico es rico en antioxidantes, ayudándonos en la prevención del cáncer y de enfermedades cardiovasculares. Eso sí, como decíamos, cuanto más puro, mejor. Además, el chocolate amargo disminuye los niveles de colesterol, en concreto el LDL, es decir, el malo y, nos ayuda frente a la hipertensión. Mejora la circulación gracias a sus propiedades anticoagulantes y es rico en minerales como el potasio, hierro y magnesio. También es ideal para mantener la piel nutrida e hidratada. De hecho, el tratamiento con chocolate es ideal para combatir la celulitis, las manchas de la piel y nos ayuda a evitar las arrugas. Los antioxidantes flavonoides, nos protegen la piel frente a rayos UV.
Evíta su consumo si...
Aunque no todos podemos beneficiarnos de este alimento, ya que las personas con obesidad, diabetes o migrañas no es recomendable que lo consuman.
También podemos hablar del cacao de Algarroba que, a diferencia del cacao, tiene menos grasas, no es amargo, es más digerible y no contiene estimulantes. Hoy en día se utiliza para preparar sucedáneos del chocolate, dulces variados y batidos.
Por lo tanto, el chocolate 70% de cacao, consumido en cantidades normales (unos 45 g diarios) y en combinación con una dieta sana y equilibrada es ideal para mantener un buen estado de salud y, por supuesto, una buena fuente de energía, en especial para los deportistas.
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