La revista ¡HOLA! publica esta semana un extenso reportaje exclusivo de la fabulosa mansión de Antonio Banderas y Melanie Griffith en Los Ángeles. Casi treinta páginas con las mejores imágenes del hogar de la pareja, que ha sido fotografiado por primera vez, y una extensa entrevista con el matrimonio, que nos ha abierto las puertas de su casa y de su corazón.

La mansión, de estilo mediterráneo, en concreto toscano, está situada en la zona de Hancock Park, al este de Hollywood, fue construida en 1925, tiene seis mil metros cuadrados y está dotada de numerosas habitaciones. Acogedora y cómoda, poco tiene que ver con las típicas casas-escaparte de la meca del cine, fue adquirida por la pareja hace dos años. En la biblioteca, situada en la planta baja, el actor hace balance de sus once años en Estados Unidos: desde sus comienzos allí gracias a la nominación al Oscar de Mujeres al borde de un ataque de nervios, hasta el excelente momento profesional y personal que atraviesa.

Tras vivir un tiempo a caballo entre América y España: “me llama Trueba para hacer Two Much. Es ahí cuando cambia realmente mi vida y, lo hago por razones familiares: mi mujer estuvo casada en dos ocasiones anteriores, tiene dos hijos de diferentes padres y yo no me puedo ir a vivir a España dejando a dos niños en los Estados Unidos.”

El actor cuenta paso a paso de sus comienzos, habla de su carrera en Estados Unidos y de su deseo de retomar su profesión en Europa, de su pasión por la vida y por la vela, de Hollywood y de su primer encuentro con Melanie Griffith y de su matrimonio con ella: “Cometí una imprudencia terrible, porque lo primero que le pregunté fue su edad. Yo estaba nervioso, no sabía qué decir y le pregunté: “¿Cuántos años tienes?”. Me miró y me dijo: “¿Qué pregunta, no? Para ser la primera vez que hablamos.... Le dije: “Perdóname, perdóname”. Pero ella me dijo inmediatamente los años que tenía, que en aquel momento eran 37”.

En la revista ¡HOLA! también encontrarán interesantes declaraciones de la protagonista de Armas de mujer, quien reconoce que. “Para mí, la felicidad...es Antonio –el soporte más importante de mi vida-, mis hijos y llevar una vida sencilla y clara”.