Caídas que han pasado a la historia, divertidas bromas con sus compañeros, vestidos que se rompen inoportunamente... Si hay algo que caracteriza a Jennifer Lawrence es que consigue convertirse en el centro de todos los flashes y es imposible que pase desapercibida. La gala de los Oscar no iba a ser menos y se ha convertido en en la 'reina' de la fiesta en el patio de butacas.
La actriz ha aparecido en la alfombra roja haciendo gala del 'sello JLaw' y protagonizando un posado de lo más divertido.
Para acudir a la 90º edición de los Oscar, Jennifer ha lucido un bonito diseño tipo armadura de paillettes de Christian Dior combinado con un bolsito de color negro. Eso sí, una vez dentro del Teatro Dolby su inseparable 'compañera' ha sido una copa de vino blanco.
Sin pensárselo dos veces, Lawrence ha demostrado lo cómodo que era su vestido, ya que no le ha impedido saltar literalmente entre las butacas, sin despeinarse y sin derramar ni una sola gota de su vino blanco. ¿Para qué rodear si podía recurrir a este atajo?
¡La actriz ha vuelto a hacerlo! y sus imágenes se han convertido en virales en las redes sociales, donde están circulando numerosos gifs y divertidos vídeos.
Durante la gala, la actriz ha estado charlando con otras estrellas de la gran pantalla, como Meryl Streep.
Decimos que vamos a echar de menos momentos como estos porque recientemente ha anunciado que se retira del cine, explicando los motivos que le han llevado a tomar esta decisión. "Voy a tomarme un año sabático. Trabajaré con la organización ‘Represent.Us’, tratando de ayudar a los jóvenes a involucrarse políticamente a nivel local", anunció en una entrevista para Entertainment Tonight. La intérprete se va a enfocar en la lucha contra la corrupción política, pero ha querido aclarar que su decisión "no tiene nada que ver con la política partidista. Es solo tratar de aprobar leyes estatales que puedan ayudar a prevenir la corrupción y arreglar nuestra democracia".
Con Salma Hayek también ha estado conversando, ¿de qué habrán hablado?
La actriz también tuvo el honor de saludar a Christopher Plummer, quien, con 88 años y gracias a su papel en Todo el dinero del mundo, se ha convertido en el actor más longevo en ser nominado en toda la historia de los Oscar.
Jennifer... te vamos a echar de menos. ¡Vuelve pronto!