La gala de los Oscar no pudo empezar más animada. Justin Timberlake puso la nota musical al comienzo de la noche, levantando a todo el Dolby Theatre de Los Ángeles al ritmo de Can't stop the feeling. Y entre nota y nota, todas las miradas estaban puestas en Jessica Biel, que no ha dudado en ponerse a bailar junto a su marido
Tras el animadísimo baile, ¡llegó el beso! Y, cómo no, todos los invitados rompían en aplausos ante un momentazo tan romántico como ese
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Las referencias políticas no se hicieron esperar. En su primer sketch de la noche, Jimmy Kimmel, maestro de ceremonias de esta edición, aprovechó la ocasión para hacer un guiño a la polémica que surgió con Meryl Streep cuando Donald Trump dijo que sus nominaciones estaban "sobrevaloradas". Ante la gran ovación de los presentes, la actriz, que optaba a la estatuilla por interpretar a Florence Foster Jenkins en la película con el mismo nombre, se levantaba de su asiento muy agradecida por todo el cariño recibido
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El tatuaje que esconde bajo el pecho de la actriz Scarlett Johanson ha sido otro de los momentazos de los Oscar, en este caso, de la alfombra roja. Con cambio de look, la intérprete asistió sola tras separarse recientemente de su marido, Romain Dauriac
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Lazos, insignias y peluches: estas fueron algunas de las silenciosas reivindicaciones que los actores y celebridades invitados quisieron lucir como defensa de diferentes causas. El lazo azul que lucían muchos de los asistentes representaba a ACLU -American Civil Liberties Union-, la organización sin ánimo de lucro por los derechos civiles de EE UU. El galardonado Jackie Chan, por su parte, quiso lucir con dos peluches de oso panda, un animal del que es embajador desde hace años y por cuyos derechos lucha. Mientras, Emma Stone fue de las más discretas al colocarse una insignia del mismo tono de su vestido con el logo de Planned Parenthood, crítica al decreto de Trump que corta financiación a ONGs que promueven aborto
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"Como mexicano, como latino, como migrante y como ser humano, estoy contra toda clase de muro que pretenda separarnos". Así de claro quiso mostrarse el actor Gael García Bernal en uno de los mejores discursos de la noche, que proclamó cuando subía a entregar el galardon en las categorías de Mejor Cortometraje y Largometraje Animado al lado de la actriz, Hailee Steinfeld. Él no fue la única cara visible mexicana. La actriz Salma Hayek también entregó otro galardón
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El director iraní Asghar Farhadi se llevó finalmente la estatuilla dorada en la categoría de mejor película de habla no inglesa por El viajante. El cineasta, que ya había avisado que no asistiría a la gala como protesta por la orden sobre inmigración firmada por el presidente estadounidense, Donald Trump, la cual impide a los pasajeros provenientes de 7 países (uno de ellos Irán) entrar en los Estados Unidos, estuvo presente a través de un discurso que leyeron por él
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Jennifer Aniston volvió a convertirse en una de las protagonistas de los Oscar cuando, muy emocionada, hizo el discurso de introducción al vídeo homenaje a los fallecidos durante ese año. La actriz no pudo reprimir las lágrimas
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Si hace unos años tuvimos el 'momento pizza' y posterior selfie, este año los Oscar han contado con otra gran anécdota: varios turistas que durante unos minutos pudieron pasear por las butacas del teatro y fotografiarse con algunos de los actores de la gala. Denzel Washington incluso llegó a 'oficiar' la boda de dos de ellos
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Jimmy Kimmel, presentador de esta 89 edición, fue uno de los grandes protagonistas. Sus discursos y gags consiguieron que la gala resultase de lo más amena. Este momento junto al pequeño Sunny Pawar, al cual alzó al más puro estilo Rey León (con música de la película incluida), consiguió la carcajada general del Dolby Thatre
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Las redes sociales han vuelto a tener su pequeña parcela en la gala. El presentador no sólo ha comentado en directo lo extraño que resultaba que Donald Trump no hubiese twitteado nada tras varias horas de gala, también ha leído algunos tuits de gente anónima en los que se ridiculizaban algunos looks de los actores
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El momentazo de la noche, de la gala y casi de la historia de los Oscar fue el que ocurrió al entregarse el premio más importante de la noche: el de mejor película. Entre redobles de tambores escuchamos pronunciar a Warren Beatty y Faye Dunaway el nombre de la vencedora por equivocación: La La Land. Todo el equipo de la película de Damien Chazelle estalló en júbilo y subió al escenario para celebrar su gran noche, sin saber que lo más sonado ocurriría pocos momentos después cuando el productor de la película de Chazelle, Fred Berger, anunciaba que la gran vencedora era Moonlight. "Ha habido un error con las tarjetas", gritaba al mismo tiempo que enseñaba el sobre ganador. En medio de una gran confusión, el cast de La La Land se bajaba del escenario cuando ya había recogido el Oscar a mejor película