Falta poco más de un mes para que se celebre la 93ª edición de los Oscar y sigue habiendo mucha incertidumbre sobre cómo se celebrará la entrega de premios más importante de la temporada en Hollywood. Tras dar a conocer la lista de los nominados, ya han desvelado algunas pistas sobre cómo será la gala el próximo 25 de abril en Los Ángeles. El presidente de la Academia, David Rubin, ha anunciado que solo asistirán los presentadores, los nominados y sus acompañantes a la ceremonia y ha confirmado lo que todos temíamos: no habrá fiestas antes ni después de la gala.
No se celebrará el almuerzo de los nominados ni el Baile del Gobernador
Rubin lamenta que se tenga que prescindir de eventos tan importantes como el almuerzo previo de los nominados o la fiesta posterior del Baile del Gobernador, en la que se reunían vencedores y vencidos después de la ceremonia. Estas son solo algunas de las medidas que se tomarán para cumplir con las restricciones impuestas por la pandemia para no tener que optar por una ceremonia virtual, como ha ocurrido en otras entregas de premios como los Globo de Oro. Siguiendo la costumbre de años anteriores, no habrá presentador oficial de la gala. La ceremonia lleva sin maestro de ceremonias dos ediciones, por lo que se ha acordado mantener ese formato. Como en anteriores ediciones se recurrirá a las estrellas de Hollywood que harán entrega de los galardones, pero sin la ayuda de un conductor oficial, ya que "ahora mismo la prioridad es la seguridad y la salud de los asistentes". Aún así el presidente de la Academia se muestra confiado en que los Oscar de la pandemia serán "únicos", "memorables" y "una ocasión perfecta para la innovación y reimaginar las posibilidades de los premios".
Este año habrá dos sedes. Los Oscar se retransmitirán desde el Dolby Theatre de Los Ángeles, el escenario habitual de la entrega de premios, y Union Station, la histórica estación central de la ciudad californiana que ha sido escenario de tantas películas. Los organizadores ya anunciaron que preparaban diferentes escenarios por lo que pudiera ocurrir de cara a la celebración, pero su intención desde el principio fue que la entrega de los Oscar fuera un evento presencial, emitido en directo por televisión, como así será.
Una alfombra roja atípica
Lo que sí está confirmado es que Steven Soderbergh, director de Traffic y Erin Brockovich, producirá la ceremonia junto a Stacey Sher y Jesse Collins .En un comunicado conjunto publicado en el mes de diciembre, los productores señalaron: "Estamos emocionados y aterrorizados a partes iguales". Su plan sería "centrarse en las películas y en las personas que las hacen de una manera nueva, y esperamos crear un espectáculo que realmente se parezca a las películas que todos amamos".
Debido a las circunstancias, tal vez veamos una alfombra roja parecida a la de los premios Goya, por la que solo desfilaron presentadores y nominados antes de la ceremonia. De cualquier modo, solo nos queda esperar a que la Academia anuncie a los presentadores de este año que, además de desvelar quienes son los vencedores de las preciadas estatuillas, serán los encargados de aportar todo el glamour a la cita más relevante del cine en Hollywood.