La primera vez que Lady Gaga ha subido al escenario durante la gala de entrega de los Oscar, ha hecho llorar a miles de personas con su actuación junto a Bradley Cooper, con quien ha interpretado Shallow, el tema central de la película Ha nacido una estrella. La segunda vez, ha sido ella quien no ha podido contener las lágrimas al recoger el premio a la Mejor Canción Original, precisamente por este tema. Desbordada por la situación y con la voz entrecortada, la artista ha pronunciado un emotivo discurso en el que ha hablado de la importancia de no rendirse y ha dedicado unas bonitas palabras a su compañero de reparto. Dale al play y no te lo pierdas.