La 'celebrity' gritó, aplaudió, se emocionó... demostrando que es su fan número uno
Kim Kardashian ha protagonizado este fin de semana unas imágenes que no suelen ser habituales. La empresaria, que siempre mantiene la compostura y suele mostrarse bastante seria, se dejó llevar por la emoción mientras veía un partido de fútbol de su hijo Saint, que ya tiene seis años
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Al igual que el resto de padres, la celebrity demostró que es la mayor fan de su hijo y, por eso, quiso acudir al campo. Como se puede ver en estas fotos, Kim tenía su propia silla plegable, pero lo cierto es que no duró mucho sentada, ya que en seguida se levantó para animar a Saint
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Kim gritó, aplaudió, se emocionó... y, sobre todo, pasó muchos nervios al ver jugar al pequeño Saint. Es más, las personas que estaban a su alrededor no pudieron evitar reírse al ver lo mal que lo estaba pasando
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Kim sufrió con cada jugada pero en un momento del partido, decidió tomar asiento para intentar calmarse
Al terminar el partido, protagonizaron esta imagen tan bonita en la que Saint abrazó a su madre cariñosamente
Ya más calmada, la hermana de Kendall y Kylie Jenner aprovechó para consultar su teléfono móvil antes de regresar a casa
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Kim salió del recinto junto a Saint, que es uno de los cuatro hijos que tuvo con su exmarido, el rapero y productor Kanye West, y su sobrino Reign Disick (hijo de Kourtney Kardashian), que ya tiene siete años
Para este día de partido, la fundadora de Skims y KKW Beauty lució un look muy cómodo pero tan llamativo como siempre, combinando una camiseta y mallas negras con una chaqueta polar XXL de color azul y chanclas de silicona de color gris
Además, llevaba sus maxigafas de sol de color negro, una botella de agua y una chaqueta naranja de manga larga anudada a la cadera