Los García Obregón despiden a Ana, la matriarca de la familia que ha fallecido este fin de semana. El sábado por la tarde veíamos a su hija Ana Obregón dar el último adiós a su madre en el tanatorio de La Paz, en Tres Cantos (Madrid), acompañada de sus hermanas, Celia y Amalia. Esta mañana ha vuelto al velatorio y ha estado arropada por más familiares y seres queridos, entre los que se encuentran sus hermano Celia, Javier y Juancho, Paloma Lago y su exmarido Alessandro Lequio, que entiende mejor que nadie el duro momento que está viviendo la actriz teniendo en cuenta que hace apenas unos días se cumplía un año de la muerte de su único hijo en común.
El año más complicado de Ana Obregón
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Con traje oscuro y una sonrisa amable, Alessandro llegaba al tanatorio dispuesto a ser ese pilar que necesita Ana en estos momentos. Un poco más tarde llegaba su padre, Antonio García, que despide a su gran amor, con la que estuvo casado cerca de 70 años. El empresario, que se desplazaba en una silla de ruedas, era ayudado por sus hijos a su llegada quienes se encargaron en todo momento de arroparle y procurar que su adiós a su compañera de vida fuese lo más discreto posible.
También estaba allí la que fuera su cuñada y ahora buena amiga, Paloma Lago, que desde la hípica, donde estaba antes de dirigirse al tanatorio a apoyar a la familia, le dedicó unas preciosas palabras a la abuela de su hijo Javier. "Hay un ángel en el cielo. Otro más", decía emocionada la presentadora. En un gesto poco habitual en él, era el propio Javier quien, animado por su madre, respondía a los periodistas que se encontraba "muy triste, pero alegre de ver que tanta gente quería a mi abuela", a la que ha definido como una persona que daba todo por los demás. Ha asegurado que "se ha ido en paz, contenta" y que "ha sido una ceremonia preciosa. También estaban más amigos como Marta Robles, que llegaba acompañada de su marido para dar todo su calos a Ana, pero también a sus hermanos en este duro trance, así como el piloto Carlos Sáinz y su mujer o el diseñador Roberto Torretta.
Ana Obregón compartió este precioso momento de sus padres hace unos meses
Sus cinco hijos, Ana, Celia, Amalia, Juancho y Javier, vuelven a demostrar la unión de la que han hecho gala durante toda su vida en los buenos y en los malos momentos. Este varapalo se produce poco después del primer aniversario de la muerte de Aless Lequio, tras un año aciago para Ana Obregón, que, sin embargo, no deja de contar con el apoyo de su familia pero también de sus muchos amigos. Su madre, Ana, había superado varios baches de salud en los últimos años. El último susto lo dio el pasado mes de abril cuando tuvo que ser ingresada unos días en un hospital madrileño, pero días más tarde recibía el alta llenando a todos de esperanza.