A pesar de que fue una de las grandes ausentes en el bautizo de su hermano Cayetano el pasado 1 de junio, Lucía ya había contado cuál era el principal motivo por el que no podía estar presente en un día tan especial para su padre, Cayetano Rivera, y para Eva González. "El trabajo es lo primero para mí. Obviamente, la familia es muy importante, pero el trabajo es el trabajo", explicó días antes de la celebración la modelo asturiana, de 20 años.