Esta vez, Eugenia Martínez de Irujo ha optado por un plan alternativo. Junto a su marido y a Calleja, viajó hasta León, la tierra del aventurero, donde pudieron disfrutar de la gastronomía de la zona y conocer de primera mano la finca El Capricho, propiedad de un amigo del presentador, en la que se encontraban bueyes de 1.500 kilos de peso