Las ilusiones de la pareja por iniciar una nueva etapa en Madrid se desvanecieron tras el cierre del mercado de fichajes. El madrileño, de 32 años, se queda en el vestuario blanquiazul, pero su situación no es fácil. Tendrá que trabajar duro para para recuperar la confianza de Juan Ramón Muñiz, el entrenador del equipo, y otorgar a la afición todas las victorias posibles