El Palacio de Buckingham ha anunciado oficialmente que Harry de Inglaterra y Meghan Markle serán los nuevos Duque y Duquesa de Sussex.
El Ducado de Sussex fue conferido el 24 de noviembre de 1801 al príncipe Augusto Federico, sexto hijo de Jorge III del Reino Unido y de su esposa, la duquesa Carlota de Mecklemburgo-Strelitz.
El castillo de Bodiam, uno de los tesoros de Sussex, refleja el esplendor de la época medieval en Reino Unido.
El territorio de Sussex, al sur de Inglaterra, limita al norte con el condado de Surrey, al este con el condado de Kent, al oeste con Hampshire y al sur con el Canal de la Mancha y está dividido en los condados de West Sussex, East Sussex y la ciudad de Brighton and Hove. En la imagen, la universidad y la iglesia del valle de Adur en Shoreham (East Sussex).
Meghan Markle será Duquesa de Sussex y no princesa Meghan después de las nupcias, ya que se trata de un honor reservado a las mujeres nacidas en el seno de la Familia Real británica, como la princesa real Ana, las princesas Beatriz y Eugenia de York o la princesa Charlotte de Cambridge.
Tras el consentimiento nupcial Meghan Markle será Su Alteza Real la Duquesa de Sussex, lo que equivale al rango de Princesa por matrimonio del Reino Unido, Gran Bretaña e Irlanda del Norte.
El Ducado de Sussex, ya casi olvidado, parece caído del cielo a la pareja, pues viene a recordar cuánto ha cambiado la institución.
Meghan Markle será oficialmente la primera Duquesa de Sussex, pues las dos esposas de Augusto Federico de Sussex, Lady Augusta Murray y Lady Cecilia Gore, no fueron reconocidas legalmente por contravenir la Ley de Matrimonios Reales de 1772.