Gracias a la tecnología ProSteam, cada ciclo de lavado finaliza con vapor, refrescando las prendas y reduciendo un 30% las arrugas y, por tanto, necesitando menos plancha. Esto, además de facilitar nuestro día a día, también produce menos desgaste y rozamiento de las fibras.
Además, el programa de vapor se puede usar sin necesidad de lavado previo para eliminar olores y poder usar menos lavados innecesarios.