Luciendo la mejor de sus sonrisas, Khloé, de 33 años, se decantó para la ocasión por un total-look negro en el que combinó una chaqueta con un sugerente escote, pantalones ajustados y zapatos con un tacón de infarto. Eso sí, todas las miradas estaban puestas en su 'tripita' y, como llevaba un cinturón, al sentarse fueron muchos los que se percataron de las que podrían ser sus primeras curvas premamá.