En la primera parte del comercial, Alexa Chung (vestida con un pantalón pitillo color negro y una camiseta a juego) y su misterioso acompañante, caminaron por una de las zonas más comerciales del exclusivo barrio de Los Ángeles, horas más tarde, ambos se marchaban en un lujoso descapotable rojo. Una segunda toma en la que la ‘influencer’ lucía una camisa de cuadros oversize.