En el año 2001, Jesulín de Ubrique sufría un grave accidente de tráfico que a punto estuvo de costarle la vida. Durante aquellos trágicos momentos, Belén Esteban y el resto de la opinión pública conocería a la que se acabaría convirtiéndose en la esposa del torero. María José Campanario, una joven de Castellón, permanecía al lado del torero en el hospital y, con el tiempo, compartiría momentos con la hija de Jesús cuando Andrea se marchaba a pasar temporadas con su padre. Algo que Belén no encajó fácilmente en un principio.