Malena y Mario tenían prevista su boda para el 17 de junio, pero con el embarazo prefirieron aplazarla para “centrarse en nuestros peques, que se van a llevar muy poco tiempo y queremos disfrutarlos al cien por cien”. Desde que iniciaran su relación en 2012, el futbolista se ha convertido en “el hombre de su vida”.