Tras varias películas que no obtuvieron el favor de la crítica, Jamie Dornan pasó a probar suerte en la pequeña pantalla. Títulos como Once upon a time (2011) o The Fall (2012) volvieron a hacer crecer sus cotas de popularidad hasta que finalmente, en el año 2013, Jamie fue elegido para interpretar a Christian Grey, protagonista de la popular adaptación cinematográfica de 50 Sombras de Grey