10 imágenes inolvidables de Audrey Hepburn
La mítica actriz hubiera soplado 88 velas en el 2017 y a día de hoy sigue siendo todo un referente de estilo. Un carisma que resumimos en 10 momentos inolvidables de Hepburn dentro y fuera de la escena.
Esta ha sido la imagen más repetida (y más imitada) de la vida de Audrey Hepburn. Su papel de Holly Golightly en la mítica película "Desayuno con diamantes", es uno de los personajes más recordados del cine.
El vestido negro de Givenchy y las joyas XXL, con las que fumaba un pitillo con una interminable boquilla, se convirtieron en historia. Pocos saben que en principio su papel se le ofreció a Marilyn Monroe, quien se negó a hacerlo porque quería dotarle de un aire más sexy, y que las joyas que lució eran bisutería de la firma Coro and Corocraft. Dos detalles que han perdido importancia 56 años después del rodaje del film frente a la imponente imagen que ha quedado para la historia.
Aunque se trata de la misma película, es necesario destacar otra de las imágenes de Audrey en ‘Breakfast at Tiffany’s’, sobre todo por su actitud. Si el look de Hepburn ha sido copiado hasta la saciedad por sus millones de fans alrededor del mundo y del tiempo, la imagen en la que Holly desayunaba frente al escaparate de la tienda en la Quinta Avenida, ha sido una de las más repetidas por los turistas que han visitado la Gran Manzana a lo largo de los años.
Todos y, sobre todo, todas, hemos querido ser ella en alguna ocasión. Junto a éste, papeles como el que realizó en 'Vacaciones en Roma', transformaron a Hepburn en un referente de estilo atemporal que sigue marcando tendencia hoy en día.
Pero como no solo de Holly se creó el mito de Hepburn, no hemos podido evitar parar en otro de sus films históricos. El mito del Pigmalión, escultor reconvertido en un 'hacedor de estilo', se hizo patente en el cine moderno con la película ‘My Fair Lady’.
Uno de los 8 Óscars con los que se alzó la película fue el de mejor fotografía. Una vez más, la personalidad transformada en charm de Eliza Doolittle, cautivó al público y crítica y sirvió para que muchas mujeres se fijaran en su estela de transformación personal.
Audrey no fue solo uno de los rostros más bellos de Hollywood, también una de las actrices de referencia de la época. ‘Historia de una monja’ supuso un antes y un después en la carrera de la actriz ya que su papel, se salía de los cánones establecidos en la época para una actriz de su belleza.
La historia de amor soterrada entre la religiosa y el doctor también fue foco de comentarios por parte de la crítica. El conflicto psicológico que se reflejó en el film contribuyó a que su interpretación se considerara como magistral.
Audrey Hepburn se alzó con la estatuilla más ansiada de los actores de medio mundo en el año 1953. La actriz consiguió el Óscar por su papel en ‘Vacaciones en Roma’ y, aunque años más tarde recibió el Óscar honorífico, la imagen de la actriz con su vestido blanco brocado obra, como no podía ser de otro modo, de Givenchy, ha permanecido en nuestra retina a través de los años.
Un espectacular diseño que ha servido de inspiración incluso para numerosas colecciones nupciales.
Precisamente, sus vestidos de novia también han dado la vuelta al mundo. Audrey fue una de las mujeres más admiradas y, sin embargo, no fue afortunada en el amor. La actriz tuvo tres parejas y se casó dos veces. Curiosamente, en las dos ocasiones que dio el “Sí, quiero”, Audrey escogió sendos vestidos cortos. Su primer matrimonio con Mel Ferrer duró catorce años y junto a él tuvo a su primer hijo, Sean.
Según recuerda su propio hijo Sean, su madre comenzó a dejar el mundo del cine cuando se quedó embarazada (estaba de tres meses en el rodaje de ‘Desayuno con Diamantes’): “Nosotros solo la vimos como madre. Ella era una mujer con un fondo de tristeza que solía dudar de sí misma”.
A pesar de que Audrey Hepburn bajó el ritmo de su vida laboral cuando se convirtió en madre, los celos por su éxito profesional hicieron mella en su matrimonio con Ferrer, cuando ella comenzaba a despuntar llegó su gran desilusión: “Lo intenté y lo intenté. Yo sabía lo complicado que era estar casado con una estrella mundial a la que reconocen en cualquier sitio. Mel sufrió mucho”.
Su segundo matrimonio llegó un año más tarde. A Audrey Hepburn le tocó ‘volverse loca de amor’ con el playboy Andrea Dotti. Su imposibilidad de quedarse embarazada y los celos que le provocaron el carácter conquistador de su segundo marido, hicieron mella en la pareja.
Audrey ha sido una actriz sobresaliente, un icono de estilo, y sobre todo una mujer cuyas imágenes han desafiado el binomio espacio y tiempo. Su belleza, su estilo y su modo de vida siguen siendo referente de la tendencia 24 años después de su muerte.