Sergi, fruto de la relación que el cantante mantuvo con Maribel Sanz, dio el salto a la pequeña pantalla en 2014 con el programa '¡Mira quién salta!' de Telecinco. El joven tenía entonces 18 años y participaba en el concurso con su madre. “Mi padre no quería que concursara y siempre vio como una traición que lo hiciera”, aseguró en aquel momento Sergi. A partir de entonces, la relación comenzó a enfriarse y Sergi no dudó en llevar el desencuentro con su padre a los tribunales, acusándole de haberle "sustraído presuntamente un contrato de trabajo" para no pagarle su pensión