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Más de 99.000 mil “me gusta” y casi 6.500 comentarios han convertido esta foto de Chayanne en un auténtico fenómeno en redes. ¿Pero qué tiene esta imagen que ha causado tanto furor entre los seguidores del artista? En ella se puede ver a Chayanne después de hacer ejercicio en el gimnasio y es que el deporte es del todo necesario para mantenerse en forma y aguantar las largas giras de conciertos que le llevan por medio mundo. ¿Será porque se ven sus abdominales por lo que los fans se han vuelto locos?
© Redes socialesEn realidad es que el artista no está solo en la instantánea, aparece con su hijo Lorenzo Valentino, que también, la imagen vale más que mil palabras, practica ejercicio de manera asidua. ¿Quién está más en forma? “Padre e hijo haciendo un poco de ejercicio... ¿Quién se anima?” escribe el cantante junto a esta foto. Los incondicionales del intérprete no han dejado de comentar lo cambiado que está Lorenzo, que tiene ya 18 años, en el que se adivina el parecido con su padre, de 48, y al que no es habitual ver con él (el puertorriqueño es bastante celoso de su intimidad). Los dos tienen un cuerpazo y así lo recalcan los fans.
El lado más íntimo y desconocido de Chayanne
Un montón de piropos que han convertido esta en una de las publicaciones más exitosas del cantante. En menos de un día tenía ya más de 80.000 “likes” y ¡la cifra sigue subiendo! Chayanne, artista puertorriqueño reconocido internacionalmente por temas como Torero o Lo dejaría todo, está casado desde hace 24 años con la abogada Mariana Elizabeth Maronesa de Figueroa, a quien se conoce como Marilisa. Venezolana y finalista en el concurso de Miss Venezuela en 1988, ha formado con Chayanne una de las parejas más estables del mundo del espectáculo.
© GtresonlineSe casaron en 1992, aunque no lo hicieron público hasta el año 1997. La pareja, que está a punto de celebrar sus bodas de plata, tiene dos hijos: Lorenzo, que nació en 1998, e Isadora, en el año 2000. Aunque no es habitual que hable de su vida personal, sí que se ha referido alguna vez a su familia como un refugio. “Mi templo es mi casa. Mi familia es el motor de mi vida, a ella (Marilisa) no la cambio por ninguna”.
