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José Ortega Cano, una vida para ser contada

Estos días se han cumplido veinte años desde su boda con Rocío Jurado, un tiempo en el que el torero ha vivido un buen número de cambios


18 de febrero de 2015 - 13:08 CET

Si la vida te puede dar un vuelco en un segundo, qué no girará en veinte años. Se dice pronto pero es que si echa la vista atrás, José Ortega Cano podría escribir un libro y estaría bien lleno de historias de todo tipo. El diestro, que actualmente cumple condena en la cárcel de Zuera por el accidente de tráfico en el que falleció el otro conductor implicado, ha pasado por muchas cosas en su vida, aunque sin duda los últimos años han sido los más difíciles.

En el año 1995, José vivía uno de los momentos más felices de su vida, al darle el sí quiero a Rocío © Archivo
En el año 1995, José vivía uno de los momentos más felices de su vida, al darle el sí quiero a Rocío

Fue en 1995 cuando daba el “sí quiero” a Rocío Jurado, cantante y torero, un binomio de éxito que ese día celebró por todo lo alto su unión al ritmo del recordado “estamos tan a gustito”, una canción con la que se arrancó el torero, tal era su felicidad. La pareja comenzó una vida en común con la hija de Rocío, fruto de su matrimonio con Pedro Carrasco, pero quería aumentar la familia. Llegaron cuatro años más tarde sus dos hijos adoptivos, José Fernando y Gloria Camila, que llenaron su casa de alegría y de risas. “Es el día más feliz de mi vida” comentó Rocío entonces, cuando les presentó en las páginas de ¡HOLA!

En 1999, llegaban los dos hijos adoptivos de la pareja, José Fernando y Gloria Camilla, que llenaron la casa de la pareja de risas y felicidad © Archivo
En 1999, llegaban los dos hijos adoptivos de la pareja, José Fernando y Gloria Camilla, que llenaron la casa de la pareja de risas y felicidad

En 2004 cuando la artista confesó que padecía un cáncer contra el que estaba dispuesta a luchar. José Ortega Cano y el resto de su familia estuvieron con ella hasta el trágico desenlace y es que, aunque luchó con valentía, no pudo hacer nada para ganar y falleció en el año 2006. No sólo Ortega Cano sino el resto de su familia y miles de fans de todo el mundo lloraron su muerte y comenzaron a echarla de menos, una nostalgia que no ha disminuido con el tiempo.

José y Rocío eran una pareja perfecta, hasta que trágicamente falleció la artista, víctima de un cáncer © Gtresonline
José y Rocío eran una pareja perfecta, hasta que trágicamente falleció la artista, víctima de un cáncer

El torero tuvo que sobreponerse al dolor para seguir adelante con sus hijos, pero la pérdida de Rocío dejó un gran vacío en su vida. No habían acabado los momentos complicados para José, ya que un trágico accidente de tráfico en el año 2011, que le dejó malherido y debatiéndose entre la vida y la muerte, supuso un nuevo revés y le habría de traer consecuencias que nunca imaginó atravesar. A raíz de este suceso, falleció el conductor del otro vehículo que se vio implicado en el accidente y se celebró un juicio contra el diestro. Fue una época mala para el torero, que además comenzó a tener problemas de corazón.

Gloria y José Fernando han sufrido la falta de sus padres durante estos meses, no sólo echando mucho de menos a su madre sino a su padre, que sigue de momento cumpliendo condena en la cárcel de Zuera © Gtresonline
Gloria y José Fernando han sufrido la falta de sus padres durante estos meses, no sólo echando mucho de menos a su madre sino a su padre, que sigue de momento cumpliendo condena en la cárcel de Zuera

Un proceso doloroso que terminó con una sentencia de dos años y seis meses de prisión, que actualmente cumple en la cárcel de Zuera, en Zaragoza. Otro mazazo para los suyos que, tras haber perdido a Rocío, perdían ahora a José. Este ingresó en prisión en abril de 2014 con varias preocupaciones en la cabeza. La principal, enfrentarse a una situación que hasta entonces no había imaginado vivir, aunque a esta se unía la ansiedad por su hijo José Fernando, que tras haber tenido problemas con la justicia y haber estado ingresado también en la cárcel durante algún tiempo, seguía un tratamiento para recuperarse de sus problemas.

Gloria se quedó de repente sin su padre, que ingresó en prision, y sin su hermano, que ingresó en la clínica López Ibor para seguir tratamiento © Gtresonline
Gloria se quedó de repente sin su padre, que ingresó en prision, y sin su hermano, que ingresó en la clínica López Ibor para seguir tratamiento

Dejaba además José a su hija Gloria, que a sus todavía 17 años se enfrentaba a la falta de su padre y hermano, sus dos grandes apoyos, aunque se quedaba arropada por sus tíos y buenos amigos que la han acompañado en estos difíciles meses. José dejaba también a su novia, Ana María Aldón, que logró devolverle la ilusión por el amor que no había tenido tras perder a Rocío, y a un bebé, José María, el hijo que tuvo con Ana María y que apenas tenía poco más de un año.

Ana María Aldón devolvió a José la felicidad y el amor y le dio a su tercer hijo José María © Gtresonline
Ana María Aldón devolvió a José la felicidad y el amor y le dio a su tercer hijo José María

Ahora, cuando estaría a punto de obtener el tercer grado penitenciario que le permitiría volver a casa, José tiene planeado comenzar una vida nueva con Ana María. Una nueva boda, disfrutar de la infancia de su niño y pasar tiempo con sus hijos... comienza su nueva historia.

José ingresó en prisión dejando a sus hijos bien arropados por sus hermanos y familiares © Gtresonline
José ingresó en prisión dejando a sus hijos bien arropados por sus hermanos y familiares

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