Pero sin duda, uno de los actos más impresionantes de la vigésimo sexta Jornada Mundial de la Juventud fue el Víacrucis presidido por el Santo Padre
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Miles de peregrinos se desplazaron hasta el Paseo de Recoletos madrileño, por donde estaban repartidos 15 de los pasos más representativos de la Semana Santa, entre las plazas de Colón y Cibeles
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Madrid asistió a algo insólito, nunca visto hasta el momento: pasos como “La Cena del Señor” de la Cofradía Nuestro Padre Jesús de Nazareno de Murcia, el famoso Cristo de Mena de Málaga, “Jesús clavado en la Cruz” de Zamora, “La Sepultura” de Segovia, o la Virgen de Regla, han salido a las calles fuera de la Semana Santa
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"Son imágenes donde la fe y el arte se armonizan para llegar al corazón del hombre e invitarle a la conversión", afirmó el papa sobre los pasos y que subrayó que los cristianos, siguiendo a Cristo, "debemos dar la vida por los hermanos"
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Durante su oración, el Pontífice pidió a los cientos de miles de muchachos asistentes que "no pasen de largo ante el sufrimiento" y agregó que la pasión de Cristo impulsa a sus seguidores a cargar sobre los hombros el sufrimiento del mundo, "con la certeza de que Dios no es alguien distante o lejano del hombre y sus vicisitudes".
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Al final del Vía Crucis y la monumental oración, todos los pasos, acompañados cada uno de dos bandas de música, fueron llevados por las cofradías hasta sus templos, en una procesión que se prolongó hasta las cuatro de la madrugada.
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Escenario montado en Cibeles para la Jornada Mundial de la Juventud, desde le que el Pontífice pronunció su discurso a los cientos de miles de asistentes
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Más de un milllón de personas, llegadas desde más de 50 países del mundo, están siguiendo al Papa Benedicto XVI en cada uno de sus pasos durante esta Jornada Mundial de la Juventud