No era la primera vez que Madrid se convertía en la capital del deporte. Ya lo fue el año pasado, cuando acogió —por primera vez en su historia— los Premios Laureus World Sports, conocidos como los Oscar de los deportistas, y, el pasado lunes 21 de abril, volvió a serlo. La alfombra roja volvió a desplegarse ante el palacio de Cibeles, sede del Ayuntamiento madrileño, en el vigésimo quinto aniversario de estos prestigiosos galardones.
Había mucho que celebrar, pero el fallecimiento del Papa Francisco —aquel mismo día— entristeció a muchos de los allí reunidos. En especial, al extenista Boris Becker, quien confesaba a ¡HOLA! que "me quedé en shock cuando me enteré". De hecho, estuvo sopesando no asistir a la cita, pero, finalmente, decidió hacerlo, acompañado de su mujer, Lilian de Carvalho, porque, como nos explicó, pese al dolor, «tenemos que continuar».
Quien tampoco quiso faltar fue Luis Figo, que nos decía que "lo mejor de mi vida" son sus tres hijas —Daniela, Martina y Stella— y fue el encargado de entregar el premio al Mejor Regreso o Reaparición del Año, que recayó en la gimnasta Rebeca Andrade.
Simone Biles y Rebeca Andrade, rivales y amigas
Rebeca nos contaba que nunca antes había estado en estos premios, en los que tuvo la oportunidad de encontrarse con Simone Biles —una de las más esperadas de la noche—, su gran 'rival' —en los pasados Juegos Olímpicos de París le arrebató el oro en suelo—, pero, ante todo, su amiga. "Es muy importante poder mostrar un deporte justo, limpio… Alguien tiene que ganar, pero eso no supone desear el mal al otro", nos comentaba sobre su sorprendente amistad.
La gimnasta estadounidense —la más laureada de la historia, con nada menos que once medallas olímpicas y otras 30 en campeonatos internacionales— era, como decíamos, una de las grandes protagonistas de la noche —Paula Badosa o Garbiñe Muguruza nos desvelaban que les hacía mucha ilusión encontrarse con ella— y consiguió el premio a Mejor Deportista en la categoría femenina de este 2025.
Rafa, la sorpresa de la noche
Ya lo anticipaba la alpinista Lindsey Vonn al principio de la gala. Es una auténtica leyenda y, aunque este año no figuraba en la lista de nominados —en la pasada edición, la fundación que lleva su nombre recibió el galardón Sports for Good—, a él le esperaba el gran premio de la noche: el de Icono Deportivo.
Rafa Nadal se coronó como Icono Deportivo y asistió con su mujer, Mery Perelló, que aparecía por primera vez en público tras conocerse su segundo embarazo
Casi dos décadas después de conseguir el Laureus a Mejor Deportista Revelación —más otros tres que recibiría después—, Rafa Nadal se subía al escenario para recoger su premio —solo otorgado antes, en 2022, a Valentino Rossi—, ante un entregadísimo público —que no paraba de aplaudir— y la reverencia de Simone Biles, que le reconocía como uno de los mejores de todos los tiempos.
Destacaba que, "gracias al deporte, he vivido cosas que jamás hubiera podido imaginar", y hacía una mención especial a su equipo y su familia, porque, sin ellos, "nada de esto hubiera sido posible".
Allí estaban viéndole, con orgullo, una vez más, Sus padres, Sebastián y Ana María; su hermana, Maribel, y su mujer, Mery Perelló, en la que era su primera aparición pública desde que se supo que estaba esperando su segundo hijo con Rafa.
No tuvo suerte, sin embargo, Carlos Alcaraz, al que muchas veces se ha tildado como su 'sucesor', que finalmente, no pudo llevarse el galardón de Mejor Deportista en la categoría masculina a casa. Se lo «arrebató» el atleta sueco Mondo Duplantis, que asistió con su novia, Desiré Inglander.
La primera alfombra roja de la pareja más glamurosa del tenis
Vestidos de blanco y derrochando glamour aparecieron Paula Badosa y Stéfanos Tsitsipás. La pareja más elegante de la pista posaba en la que era su primera alfombra roja juntos: "Nos hacía mucha ilusión compartir este momento", nos señalaba Paula. Algo que también confirmaba el tenista griego, que, con una gran sonrisa, nos decía que "es un privilegio estar aquí con ella".
La gimnasta estadounidense Simone Biles y el atleta Mondo Duplantis fueron los grandes protagonistas, consiguiendo el premio a Mejor Deportista femenina y masculino
Otra estrella del tenis —aunque ya lejos de la cancha, puesto que anunció su retirada hace un año— que brilló con luz propia fue Garbiñe Muguruza. Seis meses después de su boda con Arthur Borges, nos revelaba que ahora lleva una vida muy tranquila: "Estoy disfrutando de la familia, de mi marido, haciendo vida cotidiana y viajecitos, que ahora puedo".
El que también tuvo la oportunidad de reencontrarse con antiguos compañeros fue Feliciano López, que acudió con Sandra Gago, y nos aclaraban que, por el momento, no entra en sus planes aumentar la familia. "Tenemos bastante con dos (Darío y Marco)", añadía Feliciano.
La reaparición de Helen Lindes y Rudy Fernández tras ser padres de nuevo
Helen Lindes y Rudy Fernández volvieron a posar juntos tras dar la bienvenida a su tercer hijo, la pequeña Anais —el pasado enero—. "Es muy buena, muy dormilona, come superbién…", nos revelaba la modelo, mientras que Rudy le dedicaba unas preciosas palabras: "Para mí, Helen ha sido una pieza muy importante, sobre todo, en los momentos más difíciles".
Lamine Yamal, ganador del Premio Revelación, y el ciclista Tom Pidcock, que obtuvo el de Deportista de Acción del Año, no pudieron estar presentes en una gala en la que el Real Madrid C. F. se llevó el Laureus a Equipo del Año; Kick4Life F. C. —Fútbol por igualdad de género— el de Sport for Good Award; el surfero Kelly Slater, el premio a la trayectoria, y Jiang Yuyan, el de Deportista con Discapacidad del Año —al que también estaba nominada Teresa Perales—.
Una noche, sin duda, emocionante, en la que se reunieron los mejores entre los mejores. Algunos, todavía en activo, como el tenista Novak Djokovic o la atleta Ana Peleteiro. Otros, como Nadia Comaneci, ya 'retirados'. Pero todos unidos por una misma pasión: el deporte.