Escasos minutos antes de cerrarse la capilla ardiente del Papa Francisco y de llevarse a cabo el rito del cierre del ataúd, algunos líderes mundiales que ya se encuentran en Roma han querido despedirse personalmente de un hombre que ha hecho historia en la iglesia católica. Por el altar de la basílica de San Pedro, donde está colocado desde la mañana del miércoles el féretro de Su Santidad, han pasado no solo más de 250.000 fieles, sino también personalidades internacionales como los Macron, Manuel Filiberto de Saboya y el presidente de Brasil, quien ha encabezado la comitiva de su país.
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El presidente de Francia, Emmanuel Macron, ha llegado acompañado de su esposa, Brigitte Macron, con la que ha aterrizado esta misma tarde en el aeropuerto de Fiumicino. Faltaba poco para que el reloj marcara las 18:30 de la tarde cuando el mandatario galo y la primera dama han entrado en la imponente Basílica. Vestidos de riguroso luto y cabizbajos, han estado unos minutos junto al féretro, que es de madera y zinc. Tras conocerse la noticia de la repentina muerte del Pontífice, le recordaban junto a una imagen de su último encuentro, que se produjo en diciembre de 2024, y unas afectuosas palabras: "De Buenos Aires a Roma, el Papa Francisco ha querido que la Iglesia lleve alegría y esperanza a los más pobres entre los pobres. Para unir a las personas entre sí y con la naturaleza. Que esta esperanza resucite sin cesar más allá de él. Mi esposa y yo enviamos nuestros pensamientos a todos los católicos y al mundo en duelo".
El acceso a la plaza de San Pedro se ha cerrado a las 17:00 horas y poco antes ha accedido Manuel Filiberto de Saboya. El príncipe de Venecia y Piamonte, nieto del último Rey de Italia ha compartido imágenes desde el interior de la capilla ardiente del Papa, al que recuerda como un guía espiritual de extraordinaria humanidad: "Un hombre que ha dedicado su vida a difundir un mensaje de paz, fraternidad universal y atención hacia los más débiles y los marginados, recordando siempre y con valentía la coherencia con los grandes valores de nuestra fe. El Pontificado del Papa Francisco estuvo marcado por una obra incansable de diálogo entre culturas y religiones, y por una constante llamada a los valores fundamentales de la caridad y la misericordia, tocando los corazones de millones de fieles y no creyentes en todos los rincones del planeta"
El primer ministro de Hungría, Viktor Orbán, ha sido otra de las personalidades que ha pasado por la capilla ardiente la tarde del viernes. "En el Vaticano, presenté mis respetos al Santo Padre. Un valiente hombre de paz que apoyó a Hungría en tiempos difíciles. Su fe y su amistad no serán olvidadas", ha dicho. Además, en sus primeras horas en Roma también se ha reunido con la presidenta del Consejo de Ministros de Italia, Giorgia Meloni, con la que ha hablado de la cooperación entre ambas naciones, los principales temas de la UE y los esfuerzos conjuntos para promover la paz.
"Janja y yo acabamos de estar en una comitiva en la Basílica de San Pedro en Roma para nuestra primera despedida del Papa Francisco, compartiendo la emoción y la devoción con todos los que vinieron a presentar sus merecidos respetos al Santo Padre. Que su sabiduría, su valor y su compasión sigan iluminando los corazones de todos nosotros", ha dicho el presidente de Brasil, Lula da Silva. También estaban la expresidenta brasileña Dilma Rousseff; el presidente del Tribunal Federal de Brasil, Luís Roberto Barroso; el presidente del Senado, Davi Alcolumbre; el presidente de la Cámara, Hugo Motta; ministros y parlamentarios.
Alrededor de las 19:00 horas se han cerrado las puertas de la Basílica de San Pedro para hacer el rito del sellado del féretro del Pontífice, quien murió a primera hora del lunes tras sufrir un ictus cerebral que le causó un coma y un fallo cardiocirculatorio irreversible. El templo se volverá a abrir la mañana del sábado para la solemne despedida, que tendrá un segundo escenario: Santa María la Mayor, iglesia en la que Francisco pidió descansar eternamente. Para llegar desde El Vaticano, el cortejo fúnebre pasará por algunas de las zonas más emblemáticas de Roma y se calcula que será un trayecto de aproximadamente una hora.
Las llegadas a Roma
A última hora de la tarde han aterrizado en el aeropuerto de Fiumicino (su nombre real es Aeropuerto Internacional Leonardo da Vinci) los reyes Abdalá y Rania de Jordania así como la reina Mary de Dinamarca, quien ha hecho el viaje en solitario porque Federico X se encuentra de visita de adhesión en Japón. En la misa exequial también está confirmada la presencia de los reyes Felipe y Letizia, Carlos Gustavo y Silvia de Suecia, Felipe y Matilde de los belgas, Alberto y Charlene de Mónaco, el príncipe de Gales y los príncipes Haakon y Mette-Marit de Noruega, entre otras monarquías. Se espera que acudan representantes de 130 países e instituciones internacionales al último adiós a un hombre que quería ser recordado como 'un pastor con olor a oveja'.