El mundo llora la pérdida del papa Francisco, fallecido este lunes 21 de abril, Lunes de Pascua, a los 88 años de edad. La noticia fue anunciada con profunda tristeza por el camarlengo, el cardenal Kevin Farrell, quien declaró: "Con profundo dolor debo anunciar la muerte de nuestro Santo Padre Francisco. A las 7:35 de esta mañana, el Obispo de Roma ha vuelto a la casa del Padre". El Papa falleció en su residencia en la Casa Santa Marta, víctima de un ictus cerebral que derivó en un coma y fallo cardiocirculatorio irreversible. La Santa Sede ha informado que el Pontífice presentaba antecedentes de insuficiencia respiratoria, neumonía bilateral, hipertensión y diabetes tipo II.
Tan solo un día antes, el Santo Padre había impartido la bendición 'Urbi et Orbi' desde el balcón central de la Basílica de San Pedro, como parte de los actos del Domingo de Resurrección. Aunque delegó la lectura del mensaje al maestro de ceremonias, Diego Ravelli, aún se dirigió brevemente a los fieles con un emotivo: “Queridos hermanos y hermanas, buena Pascua”.
Este martes, el Vaticano ha hecho pública la primera imagen del féretro del papa Francisco. El cuerpo del Pontífice reposa en un sencillo ataúd de madera abierta, sin el tradicional catafalco, en la Capilla de Santa Marta. Vestido con la mitra, la sotana blanca, la casulla roja y el palio blanco, sostiene entre sus manos un rosario. La imagen ha conmovido al mundo, reflejando la sencillez y espiritualidad que caracterizaron su pontificado.
La Congregación de Cardenales se reunirá hoy a las 9:00 para definir la fecha de los funerales, que deberán celebrarse entre el cuarto y el sexto día tras su fallecimiento, es decir, entre el viernes 25 y el domingo 27 de abril. Durante esta reunión también se establecerá el calendario para el traslado de los restos a la Basílica de San Pedro y se organizarán los preparativos del cónclave, previsto entre el 5 y el 10 de mayo.
Las reacciones a su muerte no se han hecho esperar. En España, el rey Felipe VI, la reina Letizia y la reina Sofía acudieran este mediodía a la Nunciatura Apostólica para firmar en el libro de condolencias. El monarca expresó su pesar en un telegrama enviado al cardenal Giovanni Battista Re, decano del Sacro Colegio Cardenalicio, en el que manifestó: "La Reina y toda la Familia Real se unen a mí para trasladar a toda la Iglesia Católica nuestro pésame y nuestro afecto, así como nuestras oraciones por su descanso eterno". El Gobierno español ha decretado tres días de luto oficial.
En distintas partes del mundo se han celebrado misas y vigilias en honor al Papa, desde Buenos Aires hasta Madrid, pasando por Ciudad de México y Kiev. La Torre Eiffel fue apagada en señal de duelo y el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha confirmado su asistencia al funeral.
En un mensaje profético, el propio Francisco escribió el pasado 7 de febrero en el prefacio del libro del cardenal Angelo Scola, Esperando un nuevo comienzo: “La muerte no es el fin de todo, sino el comienzo de algo. La vida eterna, que quienes aman ya experimentan en la tierra en las ocupaciones cotidianas, es el comienzo de algo que nunca terminará”.
Hoy Roma despierta en luto. El mundo entero se despide de un Papa que marcó profundamente la historia de la Iglesia con su humildad, su cercanía y su mensaje de misericordia.