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La muerte de Mario Vargas Llosa el pasado domingo, 13 de abril, a los 89 años, en su casa de Lima, ha dejado huérfana a la literatura escrita en castellano. El autor universal y Premio Nobel pasó sus últimos años junto a Patricia Llosa y sus tres hijos, Álvaro, Gonzalo y Morgana. La familia ha vivido con verdadero dolor la desaparición del escritor y días después de su muerte ha sido su hijo mayor el que ha querido homenajearle con una carta abierta que se ha publicado en el periódico El País, donde cuenta el doble duelo que está atravesando.
© Europa PressEn una tribuna titulada Elogio fúnebre de mi padre, Mario Vargas Llosa, el también escritor y periodista, de 59 años, comparte con los lectores del diario las palabras de homenaje que tuvo en la despedida a su padre, al que llama en tono cariñoso “Varguitas querido”. En el artículo, Álvaro Vargas Llosa cuenta que parte de las cenizas se quedaron en Lima y otras reposarán para siempre en un lugar de Europa. También revela que él fue el único de los tres hijos que le dirigió unas palabras.
© nada_ziadeLa dedicatoria continúa entre recuerdos de su infancia y adolescencia con su padre, y donde elogia estos tres rasgos de la personalidad del escritor universal: iluso, franco e hidalgo, donde cuenta algunas entrañables anécdotas. Es entonces cuando hace referencia a la ruptura con su novia. “(Pues te cuento, ya que el diálogo continúa, que, como todos los dramas, el tuyo tiene un toque tragicómico: mientras tú agonizabas, morías y se iniciaba mi duelo, mi pareja, a la que conociste, no tuvo mejor idea que regresar a su país para siempre sin que medie una conversación de despedida o una explicación definitiva)”, prosigue Álvaro Vargas Llosa.
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© nadaziadeEl periodista se refiere a Nada Chedid, quien a los pocos días del fallecimiento de Vargas Llosa se despedía de él con unas emotivas palabras. Durante los últimos cuatro años, Nada Chedidi mantuvo una estrecha relación familiar con el Premio Nobel. “Aunque ya no estás, dejas atrás muchos recuerdos de conversaciones, viajes y, sobre todo, humor. Te debo mi español y todo lo que vino gracias a ello. Qué oportunidad haber podido conocerte en esta última etapa de tu increíble vida. Descansa en paz, querido Mario, te extrañaremos”, dijo.
© Europa Press
© nada_ziadeTras divorciarse en 2021 de Susana Abad, madre de sus dos hijos, Leandro, de 28 años, y Aitana, de 25, con la que Álvaro Vargas Llosa estuvo casado durante más de dos décadas, inició una relación con Nada, originaria del Líbano y traductora de español. Apasionada de nuestra lengua, dedicó varios años de su carrera al Instituto Cervantes de Beirut. Fue en esa ciudad, durante una visita familiar en 2006, donde Álvaro y ella se conocieron. En febrero de 2020, antes de la pandemia, ambos se reencontraron en París. Pocos meses después, en agosto, Nada sobrevivió a la devastadora explosión de Beirut. Un año después, la revista ¡HOLA! publicó en exclusiva las primeras imágenes de la pareja.
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© Getty ImagesAntes de formar parte de la familia Vargas Llosa, Nada admiraba profundamente a Mario como escritor y tras conocerle y convertida en una más del clan le atrapó su humanidad. Aunque no estaba casada con el Ávaro, el artífice de Conversación en la catedral fue para ella un suegro excepcional, con quien tuvo la oportunidad de compartir veranos y presenciar uno de los momentos más significativos de su carrera: su ingreso en la Academia Francesa.
