Frank Cuesta vuelve a ocupar titulares, esta vez por una causa que ha despertado una profunda inquietud entre sus seguidores. El popular presentador y defensor de los animales ha sido hospitalizado de urgencia en Tailandia después de sufrir la mordedura de una cobra escupidora, un incidente que podría acarrear consecuencias graves. La noticia, que ha sido difundida por el creador de contenido Javi Oliveira a través de sus redes sociales, ha generado una oleada de mensajes de apoyo y preocupación.
“Frank Cuesta se encuentra en el hospital en estos momentos tras la mordedura de una cobra escupidora”, comunicaba acompañando sus palabras con imágenes del aventurero visiblemente afectado, tumbado en una camilla y con el rostro inflamado. Las mordeduras de este tipo de serpientes pueden provocar desde dolor e hinchazón hasta problemas neurológicos, ceguera o incluso consecuencias fatales si no se tratan a tiempo. Por el momento, no se ha emitido ningún parte médico oficial, por lo que se desconoce el alcance real de la situación.
El extenista, conocido por su programa Frank de la Jungla y por su incansable lucha en defensa de los animales, reside desde hace años en Tailandia, donde dirige un santuario para especies rescatadas. En más de una ocasión ha relatado los riesgos a los que se expone a diario en su labor, pero este nuevo incidente ha encendido las alarmas debido a su historial médico y a la virulencia del ataque.
Hace solo unos días, Frank sorprendía a sus seguidores anunciando su retirada de las redes sociales con unas palabras cargadas de pesimismo: “Probablemente termine deportado o tirado en la cárcel como un perro, por eso voy a dejar de estar de cara al público”. Añadía además que no se sentía con la motivación ni la ilusión necesarias para seguir con su actividad digital y confesaba estar atravesando un momento personal complicado: “Sabéis que han estado pasando muchas cosas últimamente. Tristemente voy a tener que abandonar el país en algún momento”.
Su mensaje dejó entrever el agotamiento emocional al que se enfrenta tras años de lucha, no solo por la protección de los animales, sino también frente a situaciones legales y personales de gran complejidad. “No soy un mal tipo”, decía, en una declaración que conmovió a muchos de sus seguidores. En este contexto, el ingreso hospitalario del aventurero ha sumado una nueva dosis de preocupación. Numerosos internautas han querido mostrar su afecto, dejando mensajes como “Fuerza, Frank” o “Ojalá se recupere pronto”, mientras otros reflexionaban con ironía sobre su inquebrantable capacidad de resistencia: “La vida puede dejar de darle desarrollo al personaje de Frank Cuesta”, escribía uno de los usuarios.