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Mario Vargas Llosa© Getty Images

PRIMICIA

Así pasó Mario Vargas Llosa los días antes de su muerte: 'Todos sabían que eran sus últimas horas'

El escritor se fue en paz, contento y rodeado de su familia, quienes lo llevaron a visitar por última vez algunos de los rincones más emblemáticos de su vida literaria


Actualizado 15 de abril de 2025 - 11:50 CEST

La muerte de Mario Vargas Llosa "no fue de repente", según ha podido saber ¡HOLA! El último suspiro del Premio Nobel y gigante de las letras fue un adiós anunciado, vivido con serenidad y recogimiento por quienes más lo querían, Patricia Llosa, sus tres hijos Álvaro, Gonzalo y Morgana y sus seis nietos

Mario Vargas Llosa and Spanish actress Aitana Sanchez-Gijon (not in picture) are seen during a press conference to present Llosa's new play 'La verdad de las mentiras' in Madrid, 01 February 2006© Getty Images

El escritor "llevaba una semana malito". Su estado de salud se fue deteriorando de forma progresiva, y sus seres queridos, conscientes de que el final podía estar cerca, viajaron a Lima para acompañarlo hasta el momento final de su vida. En los últimos dos años, padecía los achaques de la vejez, con un marcado deterioro. Al final, se fue en paz y arropado por su círculo más cercano, feliz de haberse reunido con su familia y rodeado de afectos.

Mario Vargas Llosa, writer and politician, attends Day 6 of the Sunday Times Oxford Literary Festival on April 3, 2009 in Oxford, England© Getty Images

El autor de La fiesta del chivo o La tía Julia y el escribidor llevaba ya tiempo alejado de la escritura. Atrás quedaban las jornadas de disciplina férrea y creación incansable que marcaron su vida. Hace poco más de dos semanas, disfrutó mucho durante la celebración de su 89 cumpleaños, el pasado 28 de marzo. Estaba contento. Dijo, según fuentes cercanas a su familia, que era una alegría ver a todos sus seres queridos.

A Vargas Llosa le encantaba caminar, pero en los últimos tiempos ya no podía dar esos largos paseos que tanto le gustaban. Por eso, su familia decidió llevarlo a algunos de los lugares más emblemáticos de su vida literaria, para así poder contemplarlos por última vez. También seguía escuchando música clásica de forma habitual.

Mario Vargas Llosa hace 15 días celebrando su cumpleaños© AlvaroVargasLl

Sus últimas letras están impresas en el prólogo del nuevo libro de su amigo, el escritor argentino Alejandro Guillermo Roemmers, titulado El misterio del último Stradivarius. "Como viejo aficionado a la música clásica que soy, he disfrutado viendo al violín, uno de los más hermosos instrumentos musicales, convertido en protagonista de una ficción. Tengo la seguridad de que los lectores, se interesen por la música o no, sabrán apreciar esta nueva novela de Alejandro Guillermo Roemmers", escribe en las primeras páginas de la obra que será presentada en la Feria del Libro de Buenos Aires (Argentina), que se celebra del 24 de abril al 12 de mayo, en presencia de su hijo Álvaro, Javier Cercas y Javier Moro.

Además, su entusiasmo por la historia quedó reflejado también en la portada del libro, donde figura su recomendación: "Una novela donde el misterio y la pasión se entrelazan con la historia".  

Las últimas fotos de Mario Vargas Llosa: celebrando su cumpleaños hace dos semanas con sus hijos© AlvaroVargasLl

Vargas Llosa se marchó en silencio, dejando tras de sí una obra inmortal y el amor de una familia que lo acompañó hasta el final. Fue un hombre feliz porque, de alguna forma, recuperó su lugar en el mundo. Siempre decía que la muerte es lo que da sentido a la vida, por eso no tenía miedo a morir. A otras cosas sí, como al deterioro. Quería que la muerte lo sorprendiera escribiendo, o dando una conferencia. No se cumplió, pero casi. Su último adiós también será discreto. Por expreso deseo del autor, será incinerado en las próximas horas y despedido en la intimidad.

© ¡HOLA! Prohibida la reproducción total o parcial de este reportaje y sus fotografías, aun citando su procedencia.