Desde hace casi un mes, concretamente el pasado 12 de marzo, Michelle Obama lanzó junto a su hermano, Craig Robinson, su nuevo proyecto profesional: el pódcast IMO (In My Opinion). Un espacio en el que la mujer del expresidente se abre en canal en cada entrevista y muestra su lado más desconocido, ya que tal y como ella misma anunció antes de su estreno, en él quería hablar sobre "cuestiones cotidianas que moldean nuestras vidas, nuestras relaciones y el mundo que nos rodea". Y así lo está haciendo, pero también está siendo entrevistada por otros colaboradores. El último tema familiar que ha querido abordar ha sido el aterrador episodio que vivió después de que su hija Sasha Obama tuviera un accidente.
Michelle Obama se ha abierto en canal durante su última aparición en el podcast "Not Gonna Lie" de Kylie Kelce. Durante la entrevista, habló sobre el terrible suceso en el que estuvo involucrada su hija, ya que Sasha Obama tuvo un accidente de coche hace unos años. "Ser madre ha sido una lección magistral sobre cómo dejarse llevar. Por mucho que lo intentemos, hay un límite en lo que podemos controlar", comenzó explicando la que fuera la primera dama al reflexionar sobre los desafíos de la maternidad en British Vogue.
Uno de los momentos más angustiosos que Michelle experimentó como madre ocurrió cuando su hija Sasha se vio involucrada en un aterrador accidente de tráfico, convirtiéndose en un momento decisivo en su experiencia como madre. Durante la conversación que mantuvo con Kylie Kelce, Michelle habló sobre las realidades y vulnerabilidades de criar hijos que se están volviendo más independientes. Además, con el corazón en un puño, explicó cómo fue el incidente mientras reflexionaba sobre los altibajos de la crianza.
"Cuando se sacaron Malia y Sasha los carnets de conducir, les dimos un coche. Los agentes de nuestro servicio secreto, que llevaban toda la vida con nosotros, las siguieron en sus primeras salidas, ya que como adolescentes, las acompañaban a la escuela, a las fiestas...", ha comenzado narrando Michelle Obama. Aún así, y a pesar de las increíbles medidas de seguridad que tenían las dos jóvenes como hijas del presidente del gobierno, "los agentes no pudieron evitarlo todo".
"Hubo un día en el que Sasha sufrió un choque lateral. Tuvo un accidente de tráfico y lo peor es que su coche quedó destrozado. Una mujer chocó contra ella. Viví un momento horroroso que no le deseo a nadie cuando me recibí una llamada y al otro lado del teléfono escuché que mi hija había tenido un golpe y que su vehículo estaba siniestro", ha revelado Michelle. A pesar de la gravedad del asunto: "Mi hija salió ilesa, pero la experiencia fue un recordatorio de cuán poco control tienen los padres mientras sus hijos navegan por la vida luego del aterrador incidente".
La mujer de Barack Obama ha contado que "a día de hoy son dos conductoras muy expertas y llevan sus coches muy bien". Además, aprovechó para revelar una divertida anécdota familiar: "En una de las primeras clases prácticas de conducir de Malia, su instructor la subió al vehículo y le dijo, 'acelera a fondo, pisa el acelerador a fondo y luego quiero que pares, y se golpeó", relató entre risas.