Antes de decir adiós a Supervivientes, Terelu Campos (59 años) ha abierto su corazón en el Puente de las Emociones, siendo la primera concursante que lo cruza en esta edición. La presentadora, además de hablar de cómo la muerte de su padre le cambió por completo la vida, ha hecho una reflexión sobre su papel como madre. “No se sabe ser madre, se aprende cada día. Alejandra y yo somos muy diferentes de carácter, pero espero haber sido y seguir siendo una buena madre para ella. Es lo más importante de mi vida”.
El pasado mes de diciembre, Alejandra, que este lunes celebra su 25 cumpleaños, convirtió a Terelu en abuela, un nuevo rol con el que la colaboradora televisiva está más que feliz. “Era algo que no me esperaba tan pronto. Estoy encantada de que mi hija me haya dado a ese nieto al que me como. Es muy difícil describir lo que es ser abuela porque dices no es mío, es de mi hija, pero es parte de mí. Vivir el embarazo de Alejandra ha sido una de las cosas más bonitas que me ha regalado la vida”.
Eso sí, este camino no ha sido del todo sencillo porque la influencer tuvo que hacer frente a numerosas críticas porque se quedó embarazada cuando llevaba pocos meses saliendo con su chico, Carlo Costanzia. A pesar de todo, la joven pareja ha salido adelante demostrando el gran equipo que son. Buena muestra de esta sintonía son las bonitas palabras que Terelu le ha dedicado a su yerno. “Mi hija es feliz con su hijo y con Carlo. Tengo que agradecerle mucho a Carlo. Es muy cariñoso conmigo. Un padrazo. Creo que es una estupenda pareja. Espero que le den la oportunidad a Carlo que se merece”.
Al escuchar en plató esta sincera confesión, Alejandra no ha podido evitar emocionarse. “Me ha hecho llorar y todo y mira que yo aguanto”, le ha dicho a Sandra Barneda con lágrimas en los ojos. Carmen Borrego, como la orgullosa hermana pequeña y tía que es, contemplaba toda esta escena sin poder borrar la sonrisa de su cara.
El viaje de Alejandra Rubio y Carlo Costanzia
Carlo Costanzia nunca olvidará el 11 de marzo de 2025, puesto que, tras cumplir su condena por estafa, ha recuperado por completo la libertad y ha dejado atrás la pulsera telemática. Para celebrar esta gran noticia, el músico y su chica han hecho las maletas para disfrutar de un viaje familiar con destino a Italia. Hay que recordar que el sueño del protagonista de Toy Boy era saldar sus cuentas con la justicia para poder hacer una visita a su abuela paterna, que no había podido conocer al pequeño Carlo y cuya salud es delicada debido a su avanzada edad.