Samya Aghbalou se ha convertido en la primera expulsada de Supervivientes 2025 tras batirse en el duelo final con Laura Cuevas. Cuando Jorge Javier les comunicó el veredicto, la que fuera concursante de MasterChef se mostró resignada: "Me habría gustado quedarme para dar más de mí, pero no pasa nada", decía con la voz entrecortada. Acto seguido la concursante se despidió de sus compañeros y abandonó la Palapa con su saco a cuestas. Lo que no esperaba era la sorpresa con la que se iba a encontrar tan solo unos minutos después.
Samya se reencuentra con Manuel en Playa Misterio
Como era de esperar, la aventura de Samya aún no ha finalizado, su destino ahora se encuentra en Playa Misterio, donde convivirá con Manuel González, el único habitante que queda en ella tras la marcha de Montoya y Anita a las playas oficiales.
Jorge Javier conectó con el gaditano para pedirle que recibiese a su nueva compañera. Samya llegaba en barca cubierta con una lona sin poder ver nada: "Yo pensaba que me iban a llevar al hotel" decía, mientras Manuel tiraba de humor: "Soy el botones". Ella no daba crédito de la situación: "¿Pero esto qué es? ¿Me estáis vacilando?". Su sorpresa fue más allá al ver que en Playa Misterio todavía no hay fuego. "Yo pensé que iba a cenar en el hotel y mañana tomar el sol. ¿No hay fuego? ¿Pero esto qué es?", decía Samya atónita.
"¿Conoces a Manuel?" le preguntaba el presentador. "Sé que ha salido en La isla de las tentaciones este año", respondía ella. "Madre mía, lo que te espera Samya, un tentador y una isla", bromeaba Jorge Javier. "Yo estoy casada eh", le decía Samya cerrando la puerta a toda posibilidad de un romance entre ellos.