Su sonrisa lo dice todo. Alice Campello está muy feliz por ver de nuevo a su familia unida y sobre todo por “haber peleado mucho” por llegar a este punto de su vida. El año pasado fue muy complicado para ella, pasó por muchos momentos difíciles por su separación y reconoce que estos meses ha aprendido mucho. “Ha sido la época más dura de mi vida, pero la que más me ha enseñado”, afirma.
La lección más importante que ha sacado: que si uno no está bien consigo mismo no puede dar lo mejor de sí a los demás. Y detrás de este trabajo de reflexión y autoconocimiento está la terapia que sigue. “Yo no estaba bien. Yo venía del embarazo de Bella, que cuando di a luz lo pasé muy mal y llevaba muchos meses muy mal y no me había recuperado ni física ni mentalmente”, contaba a ¡HOLA! en una sincera entrevista en la que hacía balance de su vida y de su futuro con motivo de su 30 cumpleaños.
La empresaria e influencer italiana no estaba atravesando una buena etapa y Álvaro tampoco y eso fue lo que los llevó a tomar la decisión de separarse el pasado verano. “Hay épocas en que, como nos ha pasado, lo ves absolutamente todo negro, porque puede que no estés bien contigo misma. Entonces, todo en general lo ves negro, ya no solo con tu pareja. Y nosotros coincidimos en un momento en el que los dos los todo lo veíamos negro. Pero luego, cuando desaparece la rabia, cuando se va el dolor que tienes contigo mismo y vuelves a ver las cosas claras, te das cuenta de que el amor puede con todo”, confesaba.
Para ella ir a terapia ha sido clave para saber qué es lo que le estaba ocurriendo y aprender a gestionar sus emociones, a encontrarse de nuevo. “La terapia es necesaria para saber que lo que te está pasando le puede pasar a cualquier persona”. Y ve muy bien que la salud mental sea un tema que haya dejado de ser tabú y que recurrir a profesionales se haya normalizado.
Reconoce que cuando todo ocurrió, no hicieron las cosas como debían y ahora, con la distancia, cree que no tomaron las decisiones correctas: “Siento que hemos tenido mucha inmadurez en cómo lo hemos llevado. Pero cuando una persona no está bien, a veces no sabe gestionar las cosas de la mejor forma”.
Por suerte, han sabido encontrarse de nuevo como pareja, valorarse aún más el uno al otro, retomar su vida juntos. “Lo que me he dedicado a hacer en estos meses es un trabajo en mí, muy profundo, al igual que Álvaro lo ha hecho en él. Y cuando los dos hemos vuelto a estar bien, hemos podido trabajar en nosotros. Entonces, cuando hemos trabajado nosotros, ya hemos podido recuperar todo”, nos explica.
Ahora, miran al futuro con ilusión, pero sin olvidar que hay que seguir trabajando a diario: “Me he dado cuenta de que, trabajando con una buena psicóloga, cuando empiezas a estar bien, todo lo ves de otra forma. Entonces, mi objetivo es trabajar muchísimo en mí y en mi salud mental. Probablemente lo que me ocurrió me pasó me pueda ocurrir muchísimas más veces, pero a lo mejor voy a tener las herramientas para saber volver a lo que soy.