Gemma Pinto ha vivido unas últimas 24 horas cargadas de emociones a flor de piel de distinta índole y por un doble motivo, en ambos casos relacionadas con las personas a las que más quiere. Primero, por un acontecimiento familiar que supone toda una alegría para los suyos y de la que ella misma nos enseñaba algunas imágenes verdaderamente entrañables. Después, porque Marc Márquez se imponía en la carrera al sprint del Gran Premio de Tailandia con el se daba el pistoletazo de salida a la temporada de motos, y que la influencer catalana, esta vez, ha seguido por televisión.
"Me explota el corazón de amor", confesaba la creadora de contenido este viernes por la mañana en su perfil público, tras convertirse en tía después que su hermano, Eduard Pinto, y su cuñada, Claudia Vignatti, hayan sido padres. La novia del piloto llegaba al hospital acompañada por su madre, Gemma Gasulla, y ya desde el ascensor antes de llegar a la habitación la veíamos con una enorme sonrisa. Ya después, posaba con la criatura en brazos mientras su rostro reflejaba la felicidad del momento, y también inmortalizaba a los recientes papás con su retoño desde la cama del centro médico.
Eduard trabaja en el sector industrial como consultor técnico de ventas en intralogística y equipos móviles para la empresa Elion (fundada en 1964), dedicada a la fabricación de maquinaria de automatización y como proveedora de sistemas. El hermano de Gemma, además, es un gran amante del deporte, en especial del ciclismo, y practica habitualmente el 'mountain bike', además de tener destreza para el 'skate' y el 'surf'. Claudia, por su parte, es 'coach', escritora (con su libro Cómo atraer la abundancia, Editorial MR del Grupo Planeta) y fundadora del movimiento Hoponoponolover, donde es su mentora espiritual.
Las 'lágrimas' de Gemma tras ver ganar a Marc
Ya por la noche, más bien de madrugada, la que es graduada en Publicidad, Relaciones Públicas y Marketing se ponía delante de la pequeña pantalla para seguir con atención el arranque del Mundial de MotoGP, donde había muchas miradas puestas sobre su novio. Le ha tocado a Gemma Pinto estar prácticamente en vela, puesto que la sesión de clasificación se disputaba primero de 4 a 5 de la mañana en horario de España. Ahí, el corredor de Cervera se hacía con la 'pole position', y posteriormente a las 9:00h tenía lugar la prueba donde este volvía a ser el más rápido frente a todos sus rivales.
Lograba además Marc la victoria y justo detrás de él quedaba en segunda posición su hermano Álex Márquez (del equipo Gresini Racing), fundiéndose ambos en un sentido abrazo tras cruzar la línea de meta. Todo ocurría en el circuito internacional de Chang, ubicado en la ciudad tailandesa de Buriram, donde hacía mucho calor con unos 33 grados en el ambiente y hasta 46 sobre el asfalto. El octocampeón del mundo se estrenaba con su mono rojo y el número 93 a la espalda en el conjunto oficial de Ducati, confirmando que es de nuevo uno de los grandes favoritos al título tras los sinsabores de los últimos tiempos.
Gemma, consciente de lo que sufrido su chico para regresar a lo más alto del podio a sus 32 años, no ocultaba su emoción al finalizar la competición. "¡Vamos!", escribía en sus redes sociales junto a los emoticonos de un corazón en llamas y una cara con lágrimas en los ojos. Como es sabido, la influencer acompaña no pocas veces al piloto en sus viajes alrededor del globo para apoyarle 'in situ'. Sin embargo, en esta ocasión, tenía motivos de peso para quedarse en Barcelona por el nacimiento del bebé que, además, hacía que muchos de sus seguidores le hayan felicitado ya como flamante 'tieta' (tía, en catalán) que es.